martes, 31 de mayo de 2016

LA SOCIEDAD DE CAZA Y PESCA DE REPÉLEGA DURANTE LA REPÚBLICA



Hoy traemos noticias de una sociedad que con el nombre de Sociedad de Caza y Pesca de Repélega tuvo gran actividad durante los años de la Republica.
Aunque todavía no hemos encontrado la fecha de su constitución, sabemos que en 1932 tenía como presidente a Pedro Arana y Butrón, con Carlos Oñederra Iriondo como vicepresidente.
Ese año se sumaron a los actos en beneficio de las cantinas escolares, organizando el 12 de junio un concurso de tiro al plato en el Campo de La Florida y el 19 de julio, con permiso municipal, celebraron “ejercicios de tiro al plato con armas largas en el Campo de las Roturas”.
Estos concursos gozaban de gran aceptación, celebrándose a primera hora de la mañana el concurso de tiro al Plato y por la tarde el de Pichón, por lo que el día de Santiago de 1934 con Alberto Otamendi Castellanos como presidente, “habiendo adquirido en arriendo cerrado con espino dos campas en el barrio para los fines propios de su misión”, organizan un trofeo patrocinado por el Ayuntamiento que se incluye en el Programa de Festejos.
Al año siguiente se vuelve a incluir en el programa municipal con el título de “Gran tiro de Pichón” en el campo de tiro de la Sociedad.
En el Archivo Histórico Municipal hemos encontrado los plano de dicho campo de tiro que mostramos junto con algunas fotos procedentes del archivo fotográfico de Marina Pérez, en la que aparece participando su padre Raimundo Pérez Rojo, aficionado a este deporte y que consiguió algunos trofeos.
En una de las fotos inferiores aparece entre las autoridades que entregan los trofeos, junto al alcalde Miguel Loredo, lo cual nos sitúa dicha foto ya en la posguerra, a finales de los años 40.
En los Programas de Festejos de 1948 a 1952 se anuncian como “Tiro al Plato” en la festividad de Santiago en el campo de La Florida.






lunes, 30 de mayo de 2016

UN PROYECTO MUNICIPAL NO REALIZADO: EL INSTITUTO NACIONAL DE 1934


En una entrada de este blog nos habló Tasio Munarriz de la inauguración de un Instituto en la Villa el año 1933 en plena época republicana, con sede en el palacio de Dueñas (actualmente Colegio Santa María) y alquilado a su propietario Antonio Ajuria que lo tenía deshabitado desde hacía años. Prestaba sus servicios a los jóvenes estudiantes de las dos márgenes de la Ría y de la zona minera y tenía carácter mixto, en su conjunto y en las aulas, algo muy avanzado para aquella época. Llegó a tener 392 alumnos oficiales y otros 100 libres en el curso 1935–1936. En él se integró el Colegio Vasco de Las Arenas como adjunto. Era filial del de Bilbao, de donde venía un tribunal para examinar y dar el título, impartiéndose el curso de ingreso y los  seis niveles de Bachillerato.
Las alumnas del Colegio del Carmen también se examinaban en el Instituto para tener el título oficial de Bachillerato. La carga económica corrió a cargo de la Diputación en un 50 %, del Ayuntamiento de la Villa en un 25 % y los otros ayuntamientos aportaron otro 25 %. La enseñanza era gratuita y en su creación fue fundamental la mediación de Indalecio Prieto, ministro de Hacienda, ante el Ministerio de Instrucción Pública y Bellas Artes.

La noticia que hoy traemos de la mano de nuestro compañero Roberto Hernándecz Gallejones, se refiere a un proyecto municipal que se quiso realizar y que al final no se llevó a cabo, y que no deja de ser de interés.
Según el informe municipal de julio de 1934, “las necesidades cada día mayores, del Instituto Elemental de 2ª enseñanza de esta Villa” hacía que surgiera la necesidad de adecuar sus instalaciones “a las exigencias pedagógicas modernas” y como tenían noticias oficiosas “de que de todos los Institutos elementales que se crearon en España para sustituir la enseñanza religiosa, solo dos y uno de ellos el de Portugalete, van a ser elevados a Institutos Nacionales, obligaba a poner un cuidado especial en su mejora para hacer de él un centro modelo”.
Como el estado construiría el edificio pero el Ayuntamiento debía ceder los terrenos, se decidió abrir un concurso de opciones de venta de solares para ofrecérselo al Estado “con destino a la construcción de un edificio para Instituto Nacional de 2ª Enseñanza y Escuela de Trabajo, en su caso”.

El proyecto del que no vemos la firma del arquitecto, y con una ornamentación muy de acuerdo con los ideales de la República se situaba entre el edificio de Dueñas y la carretera a Santurtzi. No tenemos por ahora más detalles pero suponemos que las demoras habituales y la llegada de la guerra dieron al traste con el proyecto.


domingo, 29 de mayo de 2016

HERÁLDICA PORTUGALUJA (28): CLAVES DE BÓVEDAS EN LA BASÍLICA


Como ya hemos comentado en otras entradas, lo escrito por Javier de Ybarra y Bergé en su obra “Escudos de Vizcaya”, nos ha servido de guía a los investigadores que le hemos seguido. En el volumen dedicado a Las Encartaciones y más concretamente a Portugalete, nos habló de tres escudos que coronaban sendas bóvedas de las naves laterales de la Basílica de Santa María, otorgándoles una simbología que era errónea y que vamos a tratar de explicar.
Corresponden a las bóvedas laterales más cercanas al Altar Mayor y que seguramente serán las más antiguas. Las cuatro se refieren a cuatro santos, agrupados de dos en dos, en forma de aspa. Dos que murieron en la cruz como Cristo, los hermanos Simón Pedro (cabeza abajo) y Andrés (en una cruz en forma de aspa); y dos mártires decapitados, Catalina de Alejandría y Judas Tadeo.

1.- SAN SIMÓN PEDRO.
Ybarra lo atribuyó dudando, a los Sopelana, pero claramente es erróneo al faltarle las cuatro panelas entre las llaves, como él bien apunta. Simón o Pedro fue uno de los discípulos más destacados de Jesús, a quien entregó su sucesión con las palabras: “Tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi Iglesia”. Se le representa con las llaves confiadas por Jesús que simbolizan las entradas del cielo y del infierno, que son las que se representan en el escudo. Fue crucificado por Nerón, cabeza abajo por decisión propia, en una cruz invertida.
2.- SANTA CATALINA DE ALEJANDRÍA.
Ybarra lo definió erróneamente como “signo de mercaderes”. Santa Catalina fue martirizada por orden del emperador Majencio torturándola con una máquina formada por dos ruedas guarnecidas con cuchillas afiladas, que se rompieron al tocar el cuerpo de Santa Catalina que quedó ilesa. Luego fue decapitada con una espada. Estos dos símbolos, rueda rota y espada, figuran en nuestro escudo.
Julio Gutiérrez Lumbreras expuso en el Programa de Fiestas de 1953, que una de las capillas estuvo dedicada a Santa Catalina, aunque en los libros parroquiales del siglo XVII ya no aparecía como tal, citando la de San Nicolás como la primera del lado de la Epístola, seguida de las de Achiniega, Montellano y Ugarte. En el lado opuesto, las de Rada, Coscojales y Salazar. ¿Estaría la de Santa Catalina bajo esta clave?

3.- SAN JUDAS TADEO.
Primo de Jesús, que formó parte del grupo de los primeros discípulos y también de los Apóstoles. No confundir con Judas Iscariote. Fue martirizado a golpes de garrote y decapitado con un hacha. Aparece con un libro en la mano al atribuirle la escritura de la Epístola de Judas. En la derecha suele portar un hacha o un báculo con forma de garrote. Aparece también con una escuadra, aunque algunos autores se le asignan a Santo Tomás, por haber construido un palacio para el rey Gundafar de la India. En el escudo que Ybarra también consideró de mercader, figura un hacha, un libro y una escuadra. Es el “abogado de los imposibles” o “de las causas perdidas”.

4.- SAN ANDRÉS Hermano de Simón Pedro, fue el primer apóstol. Según una tradición muy antigua, fue crucificado en Grecia en una cruz en forma de aspa. En nuestra clave figura con forma humana, barbudo y con capa, portando un libro en la mano izquierda y una cruz en forma de aspa en la derecha.

CARACTERÍSTICAS DE LAS CLAVES.
Las cuatro tienen una guirnalda vegetal de diseño muy parecido, lo que les confiere una clara relación entre ellas. La 3, muestra una lazada de una cuerda en la parte superior y tres nudos en los laterales y parte inferior. La 2, sin embargo, tiene entre las hojas cuatro nudos sin un orden claro; la 4, tiene cuatro nudos en forma de aspa. La 1, carece de cuerda.
Los círculos interiores que enmarcan los escudos, son similares.
La filigrana que rodea los escudos es similar, mostrando según Ybarra “brazos trilobulados de una cruz múltiple, acolada a los mismos”. El 2 parece tallado con más profundidad.
Los escudos (1, 2 y 3) donde se ofrecen los atributos de los santos, tienen la misma forma y están orlados, con picos en la parte superior e inferior. El 1 y el 2, están coronados. El 3, está adornado con una filacteria (cinta) en lugar de corona. El 2, es de mayor tamaño, llegando a tocar su parte inferior el marco circular.


JOSE LUIS GARAIZABAL


El trabajo completo de Heráldica Portugaluja se puede consultar en la Biblioteca Digital Portugaluja (Pinchar)

sábado, 28 de mayo de 2016

EL RELATO DEL FIN DE SEMANA: AIRES DE PORTUGALETE



En distintas ocasiones, portugalujos tanto residentes aquí como en otra parte de la península o al otro lado del Atlántico (recuerdo el caso de nuestro amigo Fran, del Ganerantz) nos han enviado escritos de diversa extensión y temática por si pudieran ser de nuestro interés.
Normalmente no les hemos encontrado encaje en el formato de nuestro blog, pero por otro lado, el tratarse de portugalujos que nos siguen desde lejos creemos que bien se merecen nuestra atención, así que vamos a estudiar para darlos a conocer.
De momento para aquellos relatos cortos que se pueden leer de un tirón en una entrada de este blog, les abriremos el apartado del FIN DE SEMANA como hemos encabezado esta entrada.
Empezamos hoy con estas líneas que nos envía Martín U. Landa, a las que hemos ilustrado con tres personajes que él cita: Pruden el colchonero del Ojillo, Felipe Llorca, el practicante, y Martina vareando la lana de los colchones:

¿A qué huele Portugalete?
Gran pregunta que me hacía un par de semanas atrás, bajando por la calle de Enmedio, después de recorrer El Ojillo, mi Ojillo, viendo las novedades.
Creo que aquí, falta algo. Ahora, Portu, no tiene los aromas de que poseía en mi infancia, olores recordados y, si dormidos a veces, jamás olvidados, pero que, en el paseo por los parajes de mi tiempo en la chiquillería, despiertan y vuelven, saludan y se quedan un rato conmigo, husmeo su esencia y su presencia, llaman a otros recuerdos, otras fragancias, otros efluvios, otros vapores,... y el placer es imparable. Cuando llega.
Ayer, oculto ya el sol, su luz se apaga en la tarde, oscurece, las nubes engordan semejando gigantescos algodones, destella el relámpago, suena el trueno, primeras gotas de lluvia de tormenta,... ¡huele a tierra mojada!,  ese era un  aviso para correr a casa antes de quedar empapado.
Se sostiene el aroma a ozono, es muy agradable,... mmmm!!.  Es uno de mis primeros recuerdos. Pero no dura mucho, no; la vida moderna no da para esos excesos hedonistas  y solitarios.
Vuelven a mi vivencia las campas de verdes pastos de Bautista, las huertas de Pablo y de Martin, los prados de Repélega y de Los Hoyos, de la  campa de "El Gordo", escenario de grandes partidos de  fútbol,... en los primeros años sesenta.
Y de más lugares, que, por asociación memorística, vienen a decirme dónde estuve y me recuerdan los días de mi infancia y adolescencia.
A saber: si abro la puerta de La Exquisita (ya no está), junto al cine Ideal, el "Revi", se podía notar, en una aspiración, el alma de las especias y semillas exóticas utilizadas en sus elaboraciones. Ah! sus mostachones, mmmm!!, exquisitos. Y cómo olvidar, los olores a pan recién hecho que emanaban de la panadería de Garaizábal, frente a la escuela de Zubeldia, sin dejar de lado los resultados de la siega en la citada campa de El Gordo ó en las de El Pasiego: efluvios bien dignos de formar parte de un perfume masculino.
Un olor peculiar es el que se nota desde la puerta en la carnicería de Gárate -así huele la buena carne-, tan peculiar como el ambiente de "El Metro" -ah! Puri, Conchi, Justo- y sus pintxos "de todo", pero no me puedo olvidar de sus aceitunas negras: nunca las he encontrado con sabor igual.
Si alguien de la villa olvida los olores que vienen de la cocina de "El Siglo", le retiramos el saludo,  y si, además, no reconoce el olor a motor de gasolino que se percibe en "la fábrica de tubos”, sobre el embarcadero de El pasaje, le quitamos el carnet de portugalujo.
Hay dos lugares: el astillero de los Astondoa y la colchonería de Eulogio, luego de Pruden, donde, los niños no éramos espantados y en un ratito, aprendíamos, sin preguntar, que cada madera tiene su aroma identificador, del mismo modo que el vino de las barricas de Acha.
Y ¿quién de nosotros no recuerda los olores en el muelle durante el cebado de los palangres de Nisio? Eran los mismos que respirábamos en las escaleras del paseo de “La Punta”, las que dan a la dársena de Peñota, mientras teníamos echado el retel para nécoras...  que algunos venderían después a cocineros locales para engrosar un poco la "paga" semanal.
Un aroma humilde, a buen aceite, que sigue en mi memoria, es el que emitían las churrerías del Muelle Viejo, una a cada lado de las escaleras que dan a la plaza. Y mira que en Madrid presumen de que sus churros y sus porras son mejores. Ya, por aquí.
A estas alturas, me parece que quedamos pocos que puedan recordar el aroma a húmedo en el vestuario del campo de San Roque. El mismo que se apreciaba en el “Callejón del  muerto” y en las escaleras de la bajada del campo de la iglesia a la estación.
Quizá alguno más, hayamos retenido en la memoria el olor a éter en el Cuarto de Socorro, donde Felipe Llorca. Años después echo de menos, los aromas en las zapaterías de la calle de Enmedio.
Hay algo que no termino de encontrar, debo de estar yendo a la caducidad. Creo que en Portu hubo algunos eucaliptus y recuerdo el aroma de sus vahos, pero no consigo situarlos; quizá en la campa de la ermita, ó ¿ésos eran plátanos?, ó acaso en la explanada, ante el lavadero de Zubeldia.
Me vais a perdonar por dejar lo más íntimo para el final: a) los olores de la lana de los colchones que vareaba mi abuela Martina y b) el aroma de las chinchortas que traía a casa. Tantos años después... no sé dónde las adquiría.
Quizá el error está en la pregunta del inicio: es lo más parecido a preguntarme por el olor de  las nubes en Portugalete, por el tacto de las paredes, por el sabor,…
¿El sabor?,… no, los sabores de Portugalete merecen un tratamiento, que, aunque sea de lejos, 560 km., y pasados 40 años, recibirán un próximo repaso.

Un abrazo a todos:


Martintxu

jueves, 26 de mayo de 2016

COMERCIOS ANTIGUOS PORTUGALUJOS: LA CARNICERÍA DE LUCITA



Siguiendo con los comercios antiguos de nuestra Villa, traemos hoy a una carnicería que durante los años de la dictadura fue muy popular en el Ojillo, como fue la de Lucita.
Lucita Soto (1919-2006) era hija de Mari López Peláez (n. 1891) que tenía su puesto de frutas en el Cristo como vimos en una entrada anterior y cuyo kiosko de madera lo puso su marido Primitivo Soto, tras ser autorizado por el ayuntamiento en 1922.
Casada con Josetxu Palacio, un portugalujo muy conocido por su panadería en el Ojillo, nada más finalizada la guerra abrió una carnicería en el nº 5 del Ojillo y que duró como tal hasta 1977.
En la foto superior aparece tras el mostrador y junto a su marido y a su hermano Primi, en la puerta de la carnicería, mientras bajo estas líneas aprovechamos para ofrecer la imagen de su madre Mari, en el puesto del Cristo y delante de la morera del Ojillo con los talleres de Pradas detrás, junto con sus nietos, el mayor de ellos Alfre Palacio Soto, que nos ha facilitado las fotografías.




miércoles, 25 de mayo de 2016

ESCOLARES PORTUGALUJOS DE HACE 90 AÑOS



Estas preciosas fotos de escolares, en las que alguien puede encontrar algún familiar, aparecen en el periódico El Liberal del 16 de julio de 1927, junto con la crónica de la visita que el periodista hizo a las Escuelas del Campo de la Iglesia, con motivo de una exposición de los trabajos realizados por los alumnos.
Según nos describe figuraban, “además de cuadernos caligráficos y de dibujo, una variadísima colección de labores manuales, correspondientes a los varios talleres creados dentro de la misma escuela, a saber: carpintería y marquetería, cerámica, mecánica, etc.
Entre los muchos trabajos curiosos, recordamos haber visto un pequeño telégrafo Morse, que funciona admirablemente; varios diminutos motores eléctricos, de notable perfección, y una infinidad de objetos de barro cocido y algunos mapas en altorrelieve.
Existe, además, un museo mineralógico; otro de aparatos de física; una extensa colección de plantas, con sus correspondientes hojas de clasificación y especificación, y otra numerosa e interesante de insectos, todo ello obra de los alumnos, que incluso construyen por sí mismo sus instrumentos de trabajo”
Sigue el cronista, dejándonos asombrados con esta descripción del sistema educativo de hace casi un siglo, donde además nos señala que el profesor era Ruperto Medina y el número de alumnos en la clase 128.
¡¡¡Sin comentarios¡¡¡


***

Sobre este mismo tema queremos dejar constancia de la labor de HARTU EMANAK organizando encuentros intergeneracionales y llevando a las aulas de los colegios portugalujos toda la historia del mundo escolar portugalujo a lo largo del siglo pasado, y con los que colaboramos gustosamente.
Es curioso que esta sesión que dimos hace unos años en el Hotel a los "amigos del mareómetro" es acogido con gran interés por esos niños que como los de ayer en el colegio Santa María tenían 11 años. El próximo día 7 de junio seguiremos en el Colegio Ruperto Medina.





martes, 24 de mayo de 2016

PROXIMA APARICION DEL Nº 21 DE CUADERNOS PORTUGALUJOS



Como ya hemos ido adelantando, el próximo número de Cuadernos Portugalujos está listo para ver la luz.
La próxima semana se procederá a enviar a los domicilios de los suscriptores de la Colección el mareómetro, y el jueves día 9 lo podrán empezar a recoger los interesados en general en el acto de presentación del mismo en el HOTEL.
Este nº 21 de Cuadernos Portugalujos está dedicado al comercio portugalujo tradicional, ocupando una página cada uno de la veintena de seleccionados, y que todos ellos se han ido presentando en este blog, con una gran aceptación.
Como decimos en la presentación de este trabajo, se ha confeccionado fundamentalmente con el material existente en nuestros archivos y que han ido apareciendo en diversas ocasiones y por lo tanto no es un trabajo completo de investigación y gracias a la colaboración entusiasta de José Luis Garaizabal, que ha solicitado ayuda a algunos amigos con familia de comerciantes para que le facilitasen fotografías e información y a nuestro compañero Roberto Hernández Gallejones, Archivero Municipal, y su equipo de colaboradoras, que han rastreado en los fondos municipales, licencias de aperturas y padrones de los mismos, hemos conseguido la rigurosidad que pretendemos dar a todos nuestros trabajos sobre la historia portugaluja.
Somos conscientes de que alguien dirá que falta tal o cual, y más importante que este fue aquel y otros muchos reproches más, pero hemos recogido lo mejor de lo que disponemos y debemos dejar patente nuestro agradecimiento a los que nos han ofrecido su ayuda para completar su historia familiar, respetar la postura de los que no han considerado oportuno abrirnos sus álbumes familiares y a los que no hemos recurrido y tienen archivos fotográficos, recordarles que estamos abiertos a darlos a conocer y que pasen a formar parte de la Historia de nuestra Villa.
Algo que nos ha saltado a la vista al investigar en nuestros comercios tradicionales ha sido la gran importancia que ha tenido la presencia de la mujer en los mismos, y que en general ha pasado desapercibida o minusvalorada, por lo que hemos procurado apoyar el que se visualice un poco mejor su actuación.
Y como consecuencia de ello ha sido elegir la presentación de este número de Cuadernos Portugalujos en el HOTEL, para además de ofrecer todo el material fotográfico de que disponemos sobre este tema y que no ha sido posible ofrecer en su totalidad en dichas páginas, ofrecer un homenaje de reconocimiento por su labor a dos mujeres que han dedicado toda su vida a su comercio portugalujo, y a la que todavía hoy, cuando ya son nonagenarias, es habitual verlas en la parte exterior del mostrador del mismo, ahora gestionado por hijas o nietas.
Estas dos mujeres, verdaderas decanas del comercio portugalujo son
y

cuyo biografía se puede volver a repasar pinchando aquí sobre su nombre.



lunes, 23 de mayo de 2016

CUANDO LA CALLE DEL MEDIO ERA EL CENTRO DEL CALZADO DE BIZKAIA


Hoy traemos aquí una noticia curiosa que hemos recogido del periódico El Liberal de 15 de enero de 1929, en el que Isidro Domínguez, anunciaba a “su numerosa clientela y público en general, que por haber hecho compras importantes para conseguir precios como nadie” liquidaba 15.000 pares de calzado (¡¡Quince mil¡¡).

Sin más comentarios, acompañamos el recorte del anuncio con dos ilustraciones que aparecen en el próximo número de Cuadernos Portugalujos que está en la imprenta, recordando a LA BOTA DE ORO, que fundara Timoteo Ortuzar, con una foto de su hijo que fue el último que gestionó el negocio (gracias a Jon Ortúzar por facilitarnos la foto de su padre Agustín), a la zapatería de PEDRO, y algunos de los calzadores metálicos que regalaban las tiendas de calzados, como eran Pedro Gutiérrez, PACHI y Lángara, que nos ha cedido Txomin Hermosilla.
Sobre Isidro Domínguez, el popular Isidrin, se dice en el citado Cuaderno Portugalujo, que su establecimiento se remontaba a 1910, y que durante la guerra civil sufrió los efectos de uno de los bombardeos, por lo que al reconstruirlo lo amplió colocando una claraboya que todavía hoy existe, pues en el local, tras convertirse en Calzados Rumbo, no se ha realizado ninguna modificación hasta nuestros días.

domingo, 22 de mayo de 2016

REFLEXIONES ANTE EL ACTO DE HOY EN PORTUGALETE.


Acompañando a algunas fotografías de las que he tomado desde mi móvil, quiero dejar constancia de algunas reflexiones personales que me han venido a la cabeza, del acto que anunciamos en la entrada anterior.

El Elai Alai como organizador del acto, ha querido rendir un recuerdo a los miembros que durante más de medio siglo han dado savia a este Grupo que hoy se muestra todavía en plena forma. Cada uno de nosotros en nuestro interior, hemos recordado a alguno en especial por proximidad personal.

He recordado a un portugalujo que no estaba presente, porque está viajando por el mundo recogiendo los frutos del éxito de su obra, como es JUANJO NOVELLA, nuestro artista más universal, que ha realizado desinteresadamente, al igual que ha hecho con otras muestras que están en la Villa, el tutor metálico que protege el arbolito, recogiendo la primera estrofa del Gernikako Arbola, y del que corremos el riesgo de aquello de que “nadie es profeta en su tierra”. Desde aquí el reconocimiento de los que le queremos.

La decoración de la calle Santa María, que tanto se ha divulgado en las redes sociales, un aspecto a resaltar, donde el trabajo de unas pocas mujeres con telas conseguidas gratuitamente, ha dado un empaque importante a esa parte del Casco Viejo y la Plaza.

DANTZARIS, un nombre que en origen no tiene sexo, ni masculino ni femenino, pero que tradicionalmente ha sido propiedad de los hombres. Hoy hemos descubierto que estas danzas han encontrado su continuidad con la participación mayoritaria de mujeres, que como debe ocurrir en Zuberoa son las que mantiene estos tradicionales bailes vascos.

La actuación de la Banda de Música Municipal conjuntamente con la Banda Municipal de Txistularis de Barakaldo, verdaderamente magnífica. Un ejemplo a seguir más a menudo.

Una muestra de nuestras tradicionales habaneras, que cantaran nuestros marino e indianos recordando su estancia en Cuba y que hace décadas cantábamos en los bares, las han recuperado acompañadas del baile de las parejas que a no dudar se daría hace un siglo y que es una muestra de la unión de tradición y modernidad.


Finalmente para terminar, señalar que la idea que hemos trasladado al Ayuntamiento de empezar a preparar la celebración del 700 aniversario de la fundación de la Villa, que tendrá lugar en 2022 y cuyo anagrama que figura en nuestra web recogemos junto a estas líneas, tiene en este tipo de actos un ejemplo a seguir.
Ahora bien, esta idea que queremos poner en marcha a comienzos del próximo año, cinco años antes del 700 de nuestra historia, y que nosotros con nuestros modestos medios sólo podemos ayudar a impulsar, tiene que ser fruto del trabajo conjunto de los partidos políticos que componen la corporación municipal, y de todas las sociedades portugalujas, de todo tipo, cuyo potencial de organizar actos está más que probado.




sábado, 21 de mayo de 2016

PORTUGALETEKO EZPATA DANTZA



Desde el pasado lunes, contamos en Portugalete con la “vecindad” de un Retoño del Árbol de Gernika, que ha sido colocado en los jardines del Campo de la Iglesia.
Inicialmente se pensó como homenaje a José Ignacio Beitia en el primer aniversario de su fallecimiento, ahora justo hace un año, pero después se amplió la dedicatoria a todos los miembros del ELAI ALAI que nos han ido dejando a lo largo de los años, junto a los que hemos trabajado codo con codo, de forma que les tengamos en la memoria cada vez que pasemos bajo sus ramas, veamos caer sus hojas cada otoño o reverdecer con nuevas fuerzas en primavera.
Este retoño de ocho años de vida, es hermano del Roble que hoy en día preside el templete de la Casa de Juntas de Gernika.
Además, un tutor diseñado por Juanjo Novella, utilizando el diseño que realizara como anagrama para los actos del 50 Aniversario de nuestra Sociedad, le protegerá hasta que sus raíces profundicen en la tierra y su tronco y ramas crezcan sanas y alejadas de peligros indeseados.
Corona la reja, parte de la primera estrofa del Gernikako Arbola, compuesto por Iparragirre: “Eman ta zabal zazu, munduan frutua, adoratzen zaitugu, Arbola Santua” (Da y extiende tu fruto por el mundo, te adoramos, Árbol Sagrado), simbolizando nuestro deseo de seguir aportando nuestro trabajo en pos del fomento de la cultura vasca. Su inauguración tendrá lugar el próximo domingo día 22, a las 12 del mediodía y ante él, se estrenará la Portugaleteko Ezpata Dantza, trabajo basado en la presencia de dantzaris en las procesiones del Corpus Christi durante el siglo XVII, cuando se engalanaban las calles para dar paso al solemne cortejo procesional. Para realzar el evento, se han engalanado los balcones y farolas de la calle Santa María, Ayuntamiento y Plaza.
El cortejo, compuesto por medio centenar de dantzaris y músicos, partirá a las 11:30 del antiguo mercado, tras hacer una primera interpretación de respeto a los pies de la Virgen de la Guía, continuando luego por la calle Santa María hasta llegar al Campo de la Iglesia, donde la comitiva será recibida por el repique solemne de campanas de la Basílica. Tras los actos de inauguración del Árbol y estreno de Portugaleteko Ezpata Dantza, a las 12:45 el cortejo bajará hasta la Ría, donde se homenajeará a las gentes de mar simbolizadas en la Cofradía de Mareantes de San Nicolás. Acabarán los actos en la Plaza, a las 13:00, con otra completa interpretación frente a la Casa Consistorial y una “habanera” popular. 

JOSE LUIS GARAIZABAL




jueves, 19 de mayo de 2016

HERÁLDICA PORTUGALUJA (27): ESCUDOS JUNTO A ANDRA MARI EN LA BASILICA



La calle central del retablo del Altar Mayor estaba constituida originalmente desde el tercer piso, mostrando la escena de la Anunciación, la Asunción de María, la Trinidad y una figura barbada en el tímpano.
La policromía y dorado de esta calle central, es obra de Francisco de Mendieta, el pintor de los cuadros popularmente conocidos como “El besamanos” (1609) y “La boda en Begoña” (1607). Juan de Pagoeta le atribuyó correctamente el primero a Francisco Vázquez, pero este era uno de los nombres que usaba Mendieta: Francisco Bázquez Retes, Francisco Bázquez de Mendieta, Francisco de Mendieta Retes, Francisco de Mendieta Bázquez y Francisco de Mendieta.
Francisco Bázquez padre, en su testamento de 22-2-1584 dice que su “criado” Francisco de Mendieta le debe doce reales de los quinientos que le prestó cuando pasó a Portugalete a dorar el retablo de la iglesia de Santa María… Por lo tanto, Mendieta doró y estofó el retablo portugalujo en 1582, como también lo fue del de San Jorge en Santurtzi. Sin embargo, doscientos años después se debió volver a dorar y estofar, ya que así aparece en las cuentas de 1749 al citar al pintor y decorador bilbaíno Antonio de Rada y al entallador portugalujo Pedro de Urquiola.
En 1948 se acometió la restauración de la imagen de Andra Mari, que había estado abandonada y retirada del culto, aun siendo la patrona de la Iglesia y de la Villa, hasta que hacia 1930, Eduardo Escárzaga la recuperó y colocó en la sacristía, salvándola de cualquier calentín en las canteras.
En 1950 se acometió una reforma del suntuoso Altar Mayor y se colocó a Andra Mari en la situación actual. Se estofó y policromó la imagen y se construyó un camarín semicilíndrico con un cuarto de esfera en la parte superior que obligó a ocultar la viga dorada donde comenzaba la primitiva calle central. A sus lados se colocaron dos ángeles dorados que sostienen en sus manos los escudos de Bizkaia, con sus lobos y orla con leones rampantes y el de Portugalete, este en la nueva versión que acababa de ser aprobada en 1949.
Para dar más realce a la imagen, se colocó sobre una nueva peana dorada, evitando que quedara oculta tras la parte superior del nuevo altar. Y aquí viene la novedad que seguramente supondrá para muchos portugalujos. En esta peana se pintó o esmaltó el escudo coronado de la Villa, con sus dos leones.


JOSE LUIS GARAIZABAL FLAÑO


miércoles, 18 de mayo de 2016

NATALIA CRIADO HERNANDEZ (1878-1948), ENPORTUGALETE.COM
















Si en una de las primeras fichas de las que publicamos en el periódico enportugalte.com recogimos la figura de Dionisio del Campo "Nisio", el último palangrero, hoy recogemos la última publicada, correspondiente a este mes de mayo, sobre su madre  Natalia Criado “La Pincha”, a quien ya dedicamos una entrada anterior en este blog, y que también hemos seleccionado para el próximo número de Cuadernos Portugalujos, dedicado a los comercios antiguos tradicionales, como fue su puesto de pescado en el Mercado.


martes, 17 de mayo de 2016

COMERCIOS ANTIGUOS PORTUGALUJOS: URBINA



Agustín Urbina Viguri (1885-1969) que bajó de Gallarta en 1913, fue uno de los cooperativistas y presidente de las “Casas baratas de Villa Nueva” en Repélega, teniendo una presencia importante dentro del movimiento democrático republicano.
Electricista de profesión, estableció en 1932 en el nº 4 del Ojillo, un “comercio de venta e instalación de aparatos de radio y artículos de electricidad”, que con su rótulo luminoso anunciaba que era representante oficial de la casa Philips Radio.
Agustín tuvo una actuación que llegaría a ser histórica al presentar al Ayuntamiento en 1933 una oferta para la adjudicación de los tradicionales corros de baile que con pianos de manubrio o acordeones animaban las fiestas y días festivos en la Plaza. Se ofrecía con “una instalación amplificadora de micrófono radio y gramófono con sus correspondientes altavoces”, por un importe más barato que los demás grupos de música.
Ante el éxito del nuevo sistema, se prolongó el horario de la música hasta las 9 de la noche, una hora después de retirarse la Banda, ampliándose a los domingos y festivos al mediodía de 12 a 1.
Se había producido un cambio radical en los bailes de la Plaza, haciendo desaparecer a los pianos de manubrio y a los acordeonistas callejeros, de tal manera que al año siguiente, 1934, ya toda la animación musical era con el aparato de radio que se colocaba en el kiosko y los altavoces que se repartían por toda la plaza, cobrando el adjudicatario a los que bailasen, una perra gorda los domingos y media los demás días. Por supuesto las mujeres no pagaban.
Ayudado por algunos de sus hijos (tuvo 7 varones y 2 mujeres), tras la guerra sufre un periodo en la cárcel, que ralentiza su actividad, y en 1950 traslada su local a la nueva calle de Carlos VII, donde continuaría su hijo pequeño Juan Urbina Santamaría, que en 2002 abriría otra nueva en General Castaños, gestionadas hoy por la segunda generación de los Urbina.


lunes, 16 de mayo de 2016

LA ESCUELA DE ARTES Y OFICIOS DE HACE UN SIGLO EN LA VILLA


Revisando las páginas del periódico El Liberal, de hace un siglo, aparecen frecuentemente referencias a las entregas de premios que se hacían en el Ayuntamiento a los alumnos y alumnas de la Escuela de Artes y Oficios.
Creada por el Ayuntamiento en 1899 estaba ubicada en el antiguo cuartel del Cristo, “el caserón”, siendo su director Ruperto Medina, y donde tras jubilarse José Zubeldia también impartió allí clases hasta su muerte en 1926.
Su misión era la formación, de la clase obrera y de la mujer, con enseñanza específica para estos dos colectivos.
La enseñanza para obreros en horario nocturno, constaba de un grado preparatorio y tres años, impartiéndose clases de Aritmética, Geometría, Dibujo, y nociones de Física y Química, “especialmente de la mecánica, con el propósito de que los alumnos conozcan la composición, fuerzas y leyes de las máquinas y herramientas que se hallen obligados a manejar”.
Las clases dirigidas a la mujer comprendían: Repasos, remiendos, compostura de ropa de color y blanca, corte y confección de vestidos de mujeres y niños, planchado de ropa blanca, cuellos, puntos, camisolas, etc. También podían darse de cocina, economía e higiene.
Sobre estas líneas la entrega de premios de 1925, donde hemos juntado una foto que hace tiempo nos facilitó de su álbum familiar Margarita González y que desconocíamos a que acto pertenecía.
Bajo estas líneas las entregas de los años 1927 y 1928.





domingo, 15 de mayo de 2016

LA FIESTA DEL ARBOL EN LOS AÑOS 20 DEL SIGLO PASADO



Tenemos la idea de agrupar en un pdf todas las noticias encontradas por Karla Llanos y José Luis Garaizabal, en el periódico El Liberal de la tres primeras décadas del siglo pasado, relativas a Portugalete, con sus fotografías correspondientes, por considerarlas de gran interés.
Hoy presentamos dos de ellas referentes a la celebración del día del árbol en los años 1927 y 1928.
La primera, celebrada en el mes de abril, se celebró en La Florida. Según las crónicas se reunían en la Plaza todos los escolares de la Villa (unos 900 según el periodista) portando banderitas de papel y acompañados por todo tipo de autoridades, precedidos de la Banda de Música Municipal, partían a las tres de la tarde.
Según la reseña se plantaron 550 eucaliptus y como fin de fiesta se jugó un partido de fútbol entre los equipos infantiles de los Clubs Fortuna y Sporting, ambos portugalujos, venciendo el primero por 5 a 1
En la noticia del año siguiente se habla de 1300 escolares, los que suben a dicha hora de las tres de la tarde, acompañados de un numeroso gentío, hasta las nuevas escuelas de Maestro Zubeldia. Se plantaron 250 árboles, entre acacias, eucaliptus y moreras, operación que se encargó a los alumnos del nuevo centro escolar.
Recitaron poesías Dominga Aurrecoechea, Elvira Alberdi, Fabio Hernando y José Bilbao, cuyos profesores eran Mateo Hernández, Amalia González, María Cabezón, y Ruperto Medina.
Tras cantar el himno al árbol y a la escuela, el alcalde pronunció un discurso obsequiándose a los escolares con meriendas y al atardecer se inició el desfile de regreso.

jueves, 12 de mayo de 2016

HERÁLDICA PORTUGALUJA (26): UN SALAZAR EN EL ALTAR MAYOR



Siguiendo la vuelta heráldica al coro y las capillas de la Basílica, nos vamos a fijar en el escudo de Salazar que figura en la parte inferior del magnífico retablo del Altar Mayor.
Durante siglos, fue una obsesión de los poderosos el ocupar los bancos más cercanos al Altar Mayor y mucho más lo era, el poder ser enterrados en el propio altar, mientras el resto de villanos lo eran en tierra bajo el suelo de las naves de la iglesia y los más pudientes en sus capillas.
Este es el caso de los Salazares, que como ya hemos ido relatando en estas entregas, eran los amos y señores de cuanto se cocía en la Villa. Ya vimos como el escudo de las trece estrellas se muestra en varios escudos nobiliarios de los que han llegado hasta nuestros días: Casa de Salazar (Félix Chávarri) en la calle del Medio, Chalet de los Retuerto-Salazar en General Castaños, Torre de Salazar, Panteón de Salazar en el Camposanto; en la Basílica, en la Capilla de la Inmaculada (versión antigua y el de las trece estrellas) y en la capilla de Coscojales.
El que ahora nos ocupa está labrado finamente en el banco del retablo, en el lado de la Epístola y sus trece estrellas de ocho puntas aparecen grabadas en un pergamino que sostienen dos ángeles mientras un tercero nos contempla de frente desde la parte superior.
En la lápida del lado del Evangelio, formada por dos piezas al igual que el escudo, nos muestra a Lope García de Salazar y Mena, biznieto del “Cronista”, que fallecería en 1536 aproximadamente. No vamos a detallar la talla, pues ya se hizo acertadamente el pasado 18 de Enero de 2016 en este blog.
Lo que si podemos afirmar, es que se trata de la última morada de sus restos, desconociendo si los de su esposa María de Tobar descansan junto a él. Así lo describió Luis de Salazar, último morador de la torre antes de su destrucción, según contó Julio Gutiérrez Lumbreras en el programa de fiestas de la villa de 1949: “Se ha creído era el retrato del Cronista y así lo da a entender una nota puesta al margen de la escritura matrimonial otorgada entre Martín Pérez de Coscojales y Casilda de Salazar, extendida en 1645, pero leyendo la escritura se ve que se refiere al último Lope García de Salazar, lo que se comprueba por haber sido él, el que adquirió el enterrorio (sic) en el altar mayor de dicha iglesia, encontrándose tan bien descrita la imagen en dicha escritura que no hay lugar a duda no sea la misma”.
Julio Gutiérrez Lumbreras en el Programa de Fiestas de 1953 nos dice: “De 1549 a 1556 se trabajó en las ventanas cornopiales (sic) del triforio. En este tiempo, y concretamente en el año 1551, se compraron seis piedras para hacer la figura del último señor del mismo nombre, del linaje salazariego, el antedicho Lope García de Salazar, el Preboste, y cuya magnífica talla forma parte del friso del retablo del Altar Mayor”.
Así que a la lista anterior, hay que añadir este último escudo que durante mucho tiempo ha pasado desapercibido a los portugalujos, ya que se encontraba parcialmente tapado por el altar, barandillas, bancos, candelabros, etc. que llenaban el presbiterio. En 1950, al sustituir el antiguo altar por otro más sencillo y tal vez tras la limpieza de la piedra, que estaba muy sucia o pintada, permitió que los feligreses y visitantes disfrutaran de esta obra de arte.
Como curiosidad, citar que junto a las lápidas mencionadas, podemos ver dos inscripciones en las pilastras que amablemente nos ha traducido Tasio Munarriz.
Las dos hacen referencia a la proclamación por el Papa Pío XII del dogma de la Asunción de María a los cielos en cuerpo y alma. La primera dice: “ANNO ASSUMPTIONIS B. M. V.” podría traducirse por: “AÑO DE LA ASUNCIÓN DE LA BENDITA, BIENAVENTURADA O BEATA MARÍA VIRGINIS” de ahí lo de B.M.V. y la de la derecha: PRIMA DIE NOVEMBRIS MCML” como “1 de NOVIEMBRE de 1950”, fecha de la proclamación del dogma. Este lema ya figuraba bordado en la puntilla pintada bajo la imagen de la Asunción de María: “ASSUMPTA EST M IN CELUM”, cuando lo correcto era “CAELUM”.


JOSE LUIS GARAIZABAL FLAÑO


miércoles, 11 de mayo de 2016

AQUELLOS PUESTOS CALLEJEROS DE GOLOSINAS



Dentro del contenido del próximo número de Cuadernos Portugalujos, que ha empezado su camino en la imprenta, dedicado a apoyar al comercio tradicional local, no nos hemos olvidados de los humildes puestos de golosinas que endulzaron nuestros años de niñez y juventud.
Son pocos los que conservamos, aunque recordamos a otros de los que no nos quedan testimonios gráficos, por lo que ofrecemos estos dos de Floren y de Evaristo.

A la izquierda Evaristo Mendez, en 1960, rodeado de jóvenes entre los que estaba su hijo Ramontxu y a la derecha, unos años antes, Florencio Villar “El Negus”, entre Juan Manuel Sopeña y Mª Ángeles Pérez.
Sobre “El Negus” nos habló José Benito López Okariz en una entrada de este blog (pinchar).


martes, 10 de mayo de 2016

EL KIOSKO DE LA CALLE DEL MEDIO HACE UN SIGLO


 Ahora que el kiosko de la parte alta de la calle del Medio, está siendo restaurado por el Ayuntamiento puede ser oportuno recordar cómo surgió su nacimiento.
Hace aproximadamente un siglo, a finales de la primera década del siglo XX, tenía su puesto de frutas en el mismo lugar María López Peláez, y fue en agosto de 1922 cuando su marido, Primitivo Soto, solicitó autorización para instalar una caseta de madera que constituía una mejora importante en cuanto a condiciones higiénicas.
En el Archivo Histórico Municipal, se conserva, según nos muestra su responsable Roberto Hernández Gallejones, dentro del expediente de concesión, un plano del mismo con sus medidas, que lo sitúa “en el ángulo comprendido entre las casas nº 32 de la calle Víctor Chávarri y 10 de la Plazuela del Cristo, adosada a las paredes de ambas fincas”.
La autorización era de carácter provisional para que los herederos no pudieran hacer reclamaciones al Ayuntamiento, y pagaría la cantidad de “50 céntimos de peseta al día”.

En la foto superior dos fotos facilitadas por Alfredo Palacio, donde se ve a su abuela Mari (nacida en la Villa en 1891) en el citado puesto y bajo estas líneas el kiosko según el plano del proyecto y actualmente en proceso de restauración.


lunes, 9 de mayo de 2016

TERESA LUCARINI Y MACAZAGA



Fue una de las maestras depuradas en 1940. Había nacido en la anteiglesia de Begoña en 1903. Era hermana del famoso escultor Joaquín Lucarini, conocido por ser el creador del “tigre” de Deusto entre otras muchas esculturas.
Teresa estudió Magisterio en la Escuela Normal de Bizkaia y escultura en la Escuela de Artes y Oficios de Atxuri. Le dieron el título de “Maestra de primera Enseñanza” en 1924. Ese mismo año ganó las oposiciones y la enviaron a Amoroto. En 1928 estaba en Arcentales y en 1933 en la escuela de Villa Nueva, en Repélega. Luego pasó a Maestro Zubeldia. En 1937 acompañó a los niños evacuados en Francia con su hija Marina Labayru, de 4 años de edad.
En la depuración de 1940 fue sancionada con la separación definitiva del servicio y baja en el escalafón con la acusación de ser comunista y no llevar medias en la escuela. Sin embargo, en 1943 y 1944 ejerció su profesión en Gernika-Luno. En la revisión de 1943 la readmitieron pero con la sanción de ejercer fuera de las provincias limítrofes, no cobrar los haberes no percibidos e inhabilitación para cargos directivos y de confianza. Fue destinada a la escuela de niñas de Grañón (La Rioja) en 1944.
Después de ver desestimados los recursos de alzada y de agravios en 1950 y 1951 porque quería volver a Portugalete, la enviaron a Gordexola, donde se jubiló y después murió.


Tasio Munarriz


domingo, 8 de mayo de 2016

DESTRUCTORES AMERICANOS EN 1957



Continuando con algunas de las fotos que nos ha enviado Karla Llanos y que completan a otras que ya presentamos hace tiempo en este blog, ofrecemos dos de las correspondientes a la estancia de cuatro destructores americanos en la dársena, bajo el último cargadero de mineral que desaparecería en 1973 y del que todavía quedan los restos de las bases del puente sobre el ferrocarril.
Los citados destructores estuvieron fondeados del 25 de junio al 1 de julio, despertando al igual que sus tripulantes al pasearse por el casco gran curiosidad entre los portugalujos.

La foto tomada con los Altos Hornos al fondo, desde el dique, nos muestra a la primera de las lanchas del palangre que tuvo José Hermosilla, bautizada con el nombre de su hijo Chomin a la que luego seguirían el Chomin I, Chomin II, hasta el cuarto.

jueves, 5 de mayo de 2016

HABLANDO DE MOJIJONES o MOJOJONES



Dado que nuevamente he participado en un par de rifi-rafes a cuenta de cuál es la fórmula castiza portugaluja para nombrar a los mejillones, bueno es desempolvar unas notas que he ido reuniendo sobre el tema.
Para no pecar de pelma, diremos que los mojijones son moluscos bivalvos, que en latín se denominan ”Mytilus edulis” y que además de estar riquísimos, tienen la particularidad de fijarse a rocas, escaleras, etc. mediante unos filamentos y un pegamento que se endurece en contacto con las aguas marinas, detrás de los cuales andan los científicos para fabricar pegamentos especiales. Los nuestros, más pequeños que los cultivados por los gallegos, viven en zonas de inter mareas y se les llama mojijones de roca.
Hoy en día, viven en cuadrilla a lo largo de los muelles de Portugalete y Las Arenas, con los ostrones y unos organismos que en Portugalete siempre hemos denominado escaramujos (balanus), también llamado por ahí bellotas de mar y que son primos de los percebes. Esta denominación, al igual que nuestro rebollo, no está recogida por la Real Academia de la Lengua. ¡Qué averías nos hacían los escaramujos en la Punta al resbalar en las rocas en aquellos añorados días de pesca de kiskillas y karramarros y velludos!.
La discusión siempre tiene dos bandos. Los de MOJOJONES y los de MOJIJONES. Para empezar, voy a recurrir a un pequeño artículo que escribió Jenaro Urtiaga “Sodupe” en la Revista El Abra de 1973, pues nos aporta una visión santurtziarra sobre MOJIJÓN. Dice Jenaro: 
“Quizás sea palabra que solamente exista en el argot de los santurzanos. Quizás se use en otros sitios. No lo sé. Pero esta es la palabra que nosotros empleamos para designar lo que el diccionario le ha dado por llamar mejillones.
Nosotros, vuelvo a insistir, los llamamos MOJIJONES, aunque no falte entre nosotros el que los denomina MOJOJONES y también (esto entre la gente de mayor edad) BOTIJONES.”.
Un ejemplo irrefutable sobre su nombre en el Abra lo tenemos en la escollera que partía del morro del muelle de Las Arenas, pretendiendo contener las arenas de la barra y que luego fue cubierta por el muelle Evaristo de Churruca. Pues bien, salvo un plano que trazó el Brigadier Vicente Tofiño en 1769, en cuya leyenda dice que fue “enriquecido” en el Depósito Hidrográfico de Madrid, todos los planos conocidos la llaman LA MOJIJONERA. Claro, cuando en Madrid verían Mojijonera enseguida lo “enriquecieron” poniendo MEJILLONERA.
Podríamos creer que fuera algún localismo que importara Evaristo Churruca desde su Mutriku de adopción, pero como veremos luego, no debió ser así si observamos las variantes de
Ondarroa y Deba. He reunido una colección de planos desde 1882 a 1899 de Churruca, de Pedro de Icaza de 1901, de un campo de regatas de 1907 y varios más de 1908, 1927, 1929, 1930 y 1951, en todos ellos figura LA MOJIJONERA, y es lógico pensar que el nombre le vendría dado de los miles de moluscos que poblarían sus rocas batidas por las olas.
Emiliano de Arriaga en su chirene “Lexicón bilbaíno” (1896), dice al referirse a MOJOJONES:
 “Es voz castellana. Ha debido o debe aún existir la forma MOJIJÓN que es intermedia entre MOCEJÓN y MOJOJÓN…. Aforismo gastronómico-bilbaíno: ‘De las sopas … la de mojojones’”.
 “Tavi” en Bardulia@yahoogroups.com, dice: 
“Hablando de variantes dialectales, la forma mojojón ‘mejillón’, propia del romance autóctono de Bizkaya, es diferente del castellano nativo MOCEJÓN, conservada en Cantabria, según Coromines de un proto-romance MUSCELLIO:NE, que da el euskera es MUTXILLOI (B). El castellano mejillón es un préstamo del gallego (portugués MEXILHA-O), que corresponde al autóctono MAZAJÓN, MOCEJÓN (Cantabria)”. 
Otros autores hablan además de MORDEJÓN, MOZAJÓN (Cantabria). Tal como lo ve “Tavi”, “la forma MUTXILLOI sería el resultado de la evolución autóctona de *muscellio:ne, mientras que MOÇOJON > MOJOJÓN pertenecería a la variante regional del castellano propia de Bizkaia y Álava”.
Eneko Barrutia en su libro “Bermeo eta Mundakako arrantzaleen hiztegia” (1996) y lo hecho público en las jornadas “Mendebaldeko berbetearen formalizazinoa” (2000), da una serie de vocablos locales: MOJIJÓN (Santurtzi), MUXILLO (Getxo), MUXULU (Leioa), MUXILLE, MUXILLIE, MUXILLEK (Bermeo), MUXILLA (Mundaka), MOJOJO, MOJOJOYA, MOKOKOYAK (Lekeitio), MUTXILLOI (Ondarroa), MOKILLOI (Deba), además de MUXILL, MUXILLÉ y MUSILLIE sin especificar la localidad.
Igualmente Carlos Glaria en su “Muskiz, historia y toponimia de un concejo del valle de Somorrostro” (2003), señala MOJOJÓN/MOJIJÓN como variantes propias de Muskiz para el mejillón.
En la vecina Castro Urdiales se les conocía como MOCEJONES.
En Barakaldo, me informan que siempre dijeron MOJIJONES. En Retuerto había una mujer que se dedicaba a venderlos por la calle con un balde ancho de cinc y era conocida como “Amalia, la mojijonera”.
En Getxo, además del ya citado MUXILLO, José Ignacio Hualde y Xabier Bilbao en su “Phonological Study of the Basque Dialect of Getxo” (1992), recogen MOJOJOI y MOJOJOYA.
Y aquí viene otra variante portugaluja, que encontró en el Archivo Histórico Municipal de Portugalete nuestro compañero de fatigas investigativas, Aitor González Gato, en un acta del 2 de febrero de 1761, página 72v. En ella se ordena: 
“Que ningún vezino ni morador de la expresada Villa lleve ni embíe al Caño de la Tarazana ni parage alguno de dentro de esta Villa los cascos de MOZIJONES, chirlas, ostras ni otro género de Vasura, pena de 1 ducado por vez al que contraviniere".
Yo creo que esta palabra portugaluja de al menos 255 años de antigüedad, se acerca más al castizo MOJIJÓN que ya citara Juan Antonio Zunzunegui en “El Chiplichandle” (1940), que a MOJOJÓN, ¿no?.
Visto lo visto, hay donde escoger. Yo seguiré usando MOJIJÓN y MOJIJONERA, pero los de MOJOJÓN tienen sus razones, así como los de todas las variantes expuestas y las nuevas que aparezcan, que serán bienvenidas.

JOSE LUIS GARAIZABAL FLAÑO