HORNACINA DE LA VIRGEN DEL ROSARIO (1)

Continuamos con el trabajo de Aitor González Gato sobre las hornacinas portugalujas, con la que existente en la barriada de El Progreso en Repélega dedicada a la Virgen del Rosario.

Al lector curioso le será bastante difícil observar esta efigie por estar protegida –quizá excesivamente– por un enrejado que impide su visión. Esta circunstancia influirá lógicamente en la descripción que de ella podemos hacer, ya que no hemos podido acceder a ninguna imagen nítida de la Virgen. Se trata de una pequeña talla, probablemente de madera, de unos 40 cms. de altura. Se cubre con un manto azul, si bien en la parte baja, a partir de las rodillas, asoma un faldón blanco. La cabeza también está cubierta por una capucha o caperuza. Sobre su brazo izquierdo sostiene al Niño Jesús, con vestido blanco, que parece alzar su mano derecha en actitud de bendición u ofrecimiento.

En cuanto a la hornacina, se trata de una copia de la primera hornacina de San Nicolás (esta como dijimos ya desaparecida), por lo que es factible suponer que fueron diseñadas al mismo tiempo –recordemos que ambas hornacinas datan de septiembre de 1945– y por la misma persona, probablemente algún arquitecto municipal (¿Luis María Gana? ¿Diego de Basterra?).

Toda la hornacina queda enmarcada por un marco de ocho lados de escaso saliente. La hornacina propiamente dicha se compone de un arco de medio punto moldurado que sobresale de la fachada, decorado con bolitas en todo su perímetro. Este arco descansa sobre una repisa semicircular moldurada de gran saliente, que a su vez apoya en una base cónica, rematada en su parte más inferior con un pequeño elemento circular, que tiene grabada una cruz. El frente de la hornacina está acristalado, y este cristal como dijimos está protegido con un enrejado que dificulta la visión de la figura.

En otra entrada de este blog (pinchar) se cita que en 1945, D. Isabelino Díez como presidente de la Sociedad de Casas Baratas El Progreso, solicitó permiso al Ayuntamiento para la construcción de una hornacina con el fin de colocar una imagen de Nuestra Señora del Rosario y celebrar una fiesta. El Ayuntamiento lo trató el 12 de septiembre y parece que la cosa fue adelante.