lunes, 7 de octubre de 2024

LA RESTAURACIÓN DE LA CASA DE LOS URIGÜEN EN EL MUELLE NUEVO

  


En septiembre de 2022 comenzó la restauración de la última casa de la tercera manzana del Muelle Nuevo (con portal n.º 20 a la calle María Díaz de Haro), acabando las obras exteriores a principios de agosto de 2024. Es uno de los escasos ejemplos que nos queda de palacio construido para la oligarquía portugaluja; hablamos de una casa construida originalmente para Luciano Urigüen, aunque luego fue reconstruida por su viuda, Cayetana Urigüen. Es la única de las casas nobles adosadas que quedan de la manzana original, pues el salvaje desarrollismo de la década de los 60 y 70 hizo desaparecer el resto del conjunto al que pertenecía.

Veamos lo que dice Gorka Pérez de la Peña Oleaga en su libro Portugalete (1852-1960) Historia de su arquitectura y expansión urbana, p. 209: “Al igual que las cuatro manzanas restantes, su autor probable es Francisco Orueta. Eran cuatro casas, una doble, que sufrieron graves desperfectos durante el sitio carlista, por lo que fueron totalmente remodeladas en 1876-1877 (…). De todo el conjunto sólo se conserva la mitad de la tercera, que fue reformada por Santos Zunzunegui en 1927 (…). Hoy sólo resta de la tercera manzana la casa número 20, que corresponde a la mitad de la casa doble que en 1877 Julio Saracíbar construyó para Cayetana Urigüen en lenguaje neo-renacentista. Presenta antuzano rematado por balaustrada pétrea y se articula en llano y dos pisos altos. Un mirador poligonal de cinco paños ocupa su eje y está rematado con cúpula semiesférica bulbosa. Las calles laterales tienen un vano por altura, con remates que imitan corona de marquesado con flor de lys. El tránsito hacia la cubierta es marcado por un friso corrido con decoración clasicista. Quedan en la fachada parte de los elementos ornamentales neo-renacentistas, un tondo y un vano ciego rematado con frontón triangular”.

La restauración actual de las fachadas exteriores ha sido realizada con gran acierto por la empresa Artelis, si bien tenemos que lamentar la demolición al principio de la obra, de ciertos elementos originales del edificio: el mirador frontal poligonal, los dos balcones de madera que se levantaban por encima de dicho mirador, parte de la cornisa superior moldurada, así como toda la balaustrada pétrea que se asomaba al paseo del Muelle Nuevo como puede comprobarse observando las fotografías. Estos elementos se han reconstruido en la última restauración, pero nos preguntamos si era realmente necesaria la demolición de los originales. Por supuesto, todo el interior es moderno.

Nos alegramos por la restauración de este valioso ejemplar de arquitectura noble portugaluja, que realzará aún más si cabe nuestro querido paseo del Muelle Nuevo.

 

Aitor González Gato.

 

sábado, 5 de octubre de 2024

NOTAS SOBRE EL MAREOMETRO, DE JOAQUIN CARCAMO



 En el número de junio de Cuadernos Portugalujos, dedicamos unas páginas al Mareómetro del Muelle Nuevo, que ha cumplido este año sus 130 años y que es único en el mundo.

En esa ocasión fue Joaquín Cárcamo quien nos asesoró para confeccionar las noticias de su construcción y que hoy nos facilita todas las noticias que ha reunido al respecto, y que nos promete completar cuando encuentre más.
Se puede consultar y descargar en la Biblioteca Digital Portugaluja, dentro del apartado de Artículos Históricos (pinchar).
Por otra parte, un tema que todavía desconocemos en su totalidad, es la existencia del mareógrafo de Portugalete, cuyas investigaciones sigue José Luis Garaizabal, quien tras recoger testimonios de portugalujos como Isaias García, Alfre Cobos, Juanjo Peñarredonda, boteros, o prácticos, está a la espera de encontrar información en los fondos de la Autoridad Portuaria de Bilbao, en estos momentos trasladados al puerto. Esperamos que pronto tengamos noticias al respecto.

La foto que acompaña esta entrada nos muestra el mareómetro, ya hace un siglo. Parece ser que corresponden a fechas inmediatamente posteriores al derribo (h. 1909) de la torre del piloto de la barra, por lo que el suelo del final del muelle nuevo aparece recién arreglado.

Publicado el 11 de diciembre 2013




viernes, 4 de octubre de 2024

EL MAREOMETRO DE PORTUGALETE, UNICO EN EL MUNDO


Finalizamos el tema que recogeremos en el número 15 de Cuadernos Portugalujos, del mes de mayo, con la opinión personal que nos ha enviado Joaquín Cárcamo, a quien agradecemos su valiosa colaboración:
1.- He encontrado bastante documentación sobre mareómetros de escala y también una documentación bastante fiable sobre los mareógrafos y su evolución. Pero es completamente imposible dar con algún detalle (he mirado en español, en inglés, en alemán, en francés, en holandés, en sueco y en turco) sobre MAREÓMETROS DE RELOJ como el vuestro. Es imposible.
He mirado también en la documentación existente sobre los fabricantes de relojes públicos: NADA.
Esto es lo que me hace pensar que es muy singular. Seguro que se tuvieron que fabricar algunos más, pero no aparecen rastros. Quizás se instalaron y desaparecieron pronto... no lo sé, es un tema para investigar... Sorprendentemente, estos días he hablado también con los máximos responsables de las redes del Instituto Oceanográfico Español y del Instituto Nacional de Geografía: NO conocían el de Portugalete ni otros similares.

2.- Al mirar algo sobre los mareógrafos, sin profundizar mucho, he visto que los primeros experimentales se colocan en Inglaterra hacia 1840 y se instalan en España hacia 1873, muy temprano. Queda alguno, pero hasta hoy no se ha documentado con fiabilidad su origen: se dice, pero sin que se pueda confirmar, que uno de los que queda pudo ser el primero que tuvo Alicante. Esto hace que siendo el Mareómetro de Portugalete de 1883, de la época de los primeros mareógrafos alemanes, le confiera un valor de antigüedad importante.

3.- Por eso me parece tan importante comprobar que conserva sus "tripas" y que se hallan en buen estado. Creo que debiera desmontarse por expertos y revisarse el pozo, el flotador y el contrapeso. Y casi creo que debiera llevarse a un museo o al interior de un edificio municipal y colocarse una reproducción, porque puede correrse el riesgo del vandalismo o la rapiña y la pérdida de un elemento tan valioso.

Finalmente Joaquín tras facilitarnos importante información sobre mareógrafos (sobre los que esperamos volver) nos deja otra pista:
Resulta que en Cascais conservan aún en funcionamiento el aparato original (yo no pude entrar a verlo durante mi estancia en Estoríl, pues los horarios de visitas eran muy restringidos). ¿ quien lo fabricó? BORREL, cinco años antes de entrar en funcionamiento, en 1877, según algunas imágenes y datos de internet. Bueno, mi opinión es que Borrel no fabricó nunca Mareógrafos (a falta de mayor investigación) y que lo que pasa es que el mareógrafo de Cascais lleva un sistema de relojería de BORREL. Pero bueno, aquí tenéis un enlace con el de Portugalete.
Publicado el 24 de abril 2013

TAL DIA COMO HOY, HACE 141 AÑOS

 


Revisando las entradas de este blog en las que hemos tratado el tema del mareómetro, nos encontramos la que presentábamos la memoria del proyecto de su construcción, cuya fecha es de 4 de octubre de 1883, justo hoy 141 años.

Construido por Maison J. WAGNER Neveu A.BORREL Succ. HORLOGES PUBLIQUES PARIS, la memoria empieza señalando que la marea más fuerte que se había alcanzado hasta entonces era de 5,50 m., por lo que habían previsto para el funcionamiento una marea de 6 m., lo que representaba una garantía y aseguraba el juego perfecto del mecanismo. En el caso de vaciarse el pozo completamente, con marea baja, habría que aumentar la profundidad un metro por lo menos, con el fin de que el flotador no presione sobre el contrapeso tensor a pesar de la precaución tomada en la confección de la caja de la polea. En ella se describe, con todo detalle, los distintos elementos que componen su mecanismo, su funcionamiento y 1as indicaciones para su montaje. En esencia consta de una columna soporte, sobre la que se sitúa una esfera en la que se reflejan los distintos niveles de marea por medio de una aguja indicadora, que a través de un mecanismo de piñones y cadenas está conectada a un flotador situado en la zona inferior de la columna.

Como señalamos, ya entonces Evaristo Churruca que había comenzado en 1881 la construcción del Muelle de Hierro, lo situó junto a la torre del piloto mayor, de manera que le facilitase la altura de la marea. Todavía en febrero de aquel año de 1883 naufragaron dos vapores británicos, el Labarruere varado en la peña de Santa Clara (a la altura del actual Puente Colgante) y el Laura Gillies en la barra. En abril, el vapor Magdalena Vicente, en julio, el Velásquez, y en diciembre el Isle of Bute, al colisionar contra los restos del Laura Gillies.

La desaparición de la barra de arena, construyendo en el final del Muelle de Hierro la torre de señales, hizo que a principios del siglo XX se eliminara ésta, pero manteniéndose el Mareómetro, que hoy es objeto fotográfico de los turistas, aunque la fotografía que acompaña al dibujo de la memoria de construcción sea de Andoni Maseda.

jueves, 3 de octubre de 2024

LAS CHICAS DE ORO. FIESTAS DE SAN ROQUE 1993



Continuando con las fotos cedidas por Mariangeles Urioste, tras los Sanroques de 1991 con el pañuelo amarillo, recogemos estas otras, de la que la superior es de Foto Torres 1993, mientras que la inferior no tenemos su año que bien pudiera ser el año anterior.

La década de los 90 fue sin duda la de "Las Chicas de oro" que cada año renovaban su pancarta.

Desde aquí nuestro reconocimiento a su aportación a la participación de cuadrillas de mujeres en la fiesta, y un recuerdo a tantas de ellas que tres décadas después ya nos están con nosotros. Pertenecían a la generación que actualmente está desapareciendo.

miércoles, 2 de octubre de 2024

EL MAREOMETRO Y LA JARRILLA, SIMBOLOS PORTUGALUJOS

  


La próxima celebración este fin de semana de PORTUTALENTO 2024, y el hecho de que yo tenga que participar hablando sobre el Mareómetro, así como la edición de una bonita tarjeta anunciándolo, con nuestro amigo “Faneca” delante del mismo, me obliga a hacer esta entrada.

Añado debajo, tras la pasada FIESTA DE LA VENDIMIA, otra vista de la Jarrilla más antigua que se conserva en la Villa, en la Cofradía de Mareantes de San Nicolas, pues es el segundo elemento que mejor representa nuestra historia.

El primero es nuestro patrimonio industrial más antiguo y único en su género en el mundo, por lo que es la representación mas genuina de nuestra historia.

Debemos recordar que cuando se fundó la primitiva puebla portugaluja, los barcos que subían hasta el primer puerto de Ugarte en el Galindo naufragaban aquí en la entrada y había que prestarles ayuda a los náufragos, desde darles comida y cobijo, y hasta recuperar sus mercancías de naufragio. Su gente ofrecía además el servicio de atoajes ayudando a los navíos a sortear la barra.

El motivo por el que el primer poblado fuera luego declarado Villa, fue el puerto, y desde las primeras Ordenanzas Municipales se preocuparon de reglamentar los servicios relacionados con el mismo, ya que era su razón de ser. Y ya en el siglo XV se reglamenta el trabajo de los pilotos lemanes, los modernos prácticos,  concediendo su titulación especifica. La historia de nuestra VILLA MARINERA va unida a la mejora de la entrada de la ría construyendo muelles y luchando contra la barra y su gente, expertos marinos, no pescadores, se centraron en la navegación mercantil, siendo su flota en algunos siglos la más importante del País. (El galeón del escudo municipal lo recuerda).

Como ayuda del piloto mayor, que desde 1824 disponía de una desaparecida torre para resguardarse y dar desde ella sus señales a los navíos que entraban y salían por la ría, se colocó en octubre de 1883 el mareómetro, que medía en cada momento el nivel de las mareas (solían variar desde 1,24 en las mareas muertas hasta 4,60 en las equinocciales), convertido en un singular elemento decorativo urbano cuya aguja de la esfera que mide la marea se mueve mediante un mecanismo de piñones y cadenas en conexión a un flotador.

La Villa complementó esta actividad marinera con la explotación vinícola de sus extensos viñedos que se extendían por todo su territorio y que duró hasta finales del siglo XIX, por lo que sus oriundos se enorgullecen de su VILLA JARRILLERA.

 Finalizamos con dos peticiones:

Que la Autoridad Portuaria, responsable del Mareómetro, transfiera ya su mantenimiento, como tiene prometido, a la Cofradía de Mareantes de nuestra Villa, para acabar con la vergüenza que representa la desidia de tener nuestro patrimonio industrial más antiguo y único en su género en el mundo, estropeado, sin funcionamiento desde hace mucho tiempo y si la memoria constructiva resaltaba la colocación de tres piezas decorativas en la esfera como eran los dos “botones” a cada lado y la “bola de coronamiento” en su parte superior, hace tiempo también que perdió uno de los “botones” sin que se preocuparan de reponerlo. 

Por cierto que la imagen del mareómetro no tiene ninguna relación con la actividad de los pescadores, con sus redes, que hemos conocido en el siglo pasado, como fueron los palangreros.

En cuanto a aparición de la jarrilla del siglo XVII, con una forma distinta de la que normalmente se utiliza, sería oportuno adaptar este modelo a las nuevas jarrillas portugalujas que se hagan, como muestra de singularidad local, salvo que los estudiosos opinen otra cosa.

 

 

martes, 1 de octubre de 2024

LAS CHICAS DE ORO. FIESTAS DE SAN ROQUE 1991

 


Mariangeles Urioste nos ha cedido sus fotos festivas correspondientes a los primeros años de la década de los 90, hace ya tres décadas, algunas de las cuales incluiremos en el próximo número de Cuadernos Portugalujos.

Estas que seleccionamos hoy corresponden al año 1991.

Como vemos fue el último año en que se usó el pañuelo rojo, que se había empezado a usar en los años 60 hasta que en la diana de 1967 el Elai Alai introdujo el amarillo, que acabó imponiéndose.

Tras haber coexistido algunos años, en 1991 la Comisión de fiestas, recuperó el rojo, que se luce en estas fotos, pero ante el rechazo general al año siguiente se volvió definitivamente al amarillo.