miércoles, 30 de junio de 2021

ARTIFICES DE NUESTRA HISTORIA FUTBOLISTICA: LOS MONTEJO (1)

 


Jesús Montejo Dobaran (1910-2003), que tuvo durante muchos años su establecimiento de ferretería en la calle del Medio, esquina con la travesía de la Iglesia y junto al comercio de electricidad de Navarro, será recordado fundamentalmente por su relación con el fútbol dentro de la centenaria historia de éste en la Villa.

Sin embargo la historia empieza con su progenitor, Eduardo Montejo Aristegui, nacido en Deusto en 1879 y que fue uno de aquellos estudiantes que fueron a estudiar a Inglaterra y de donde volvió habiendo aprendido solo a jugar al fútbol y quizás a hablar inglés. Julio Gutiérrez Lumbreras que vivió aquellos primeros años del siglo pasado, recordaba entre los introductores del futbol en la Villa “a Pedro Larrañaga, Eduardo Montejo, tan popular y querido en la Villa por su simpatía y caballerosidad y a míster Jorge Cokram, el inglés avecindado en Portugalete durante tantos años”.

Eduardo que dedicó parte de su vida a recorrer mundo, se había casado por poderes en Argentina, y sería allí donde naciera su hijo Jesús que pronto llegó a Portugalete.

Si Pedro Larrañaga fue el primer portugalujo que participó en la final de la Copa de la Coronación del Rey, en 1902, con el equipo Bizcaya, mezcla del Atlhetic y del Bilbao, Eduardo que fue uno de los socios fundadores del Athletic Club, como se ve en su carnet con el nº 16, que nos ha facilitado su nieta Mª Isabel Montejo , jugó la final del año siguiente (la primera que le reconoce la Federación Española) contra el Madrid F.C. al que ganaron por 3-2 siendo uno de los que marcaron. Realmente aquella competición de Copa en la que competía con camisetas blanquiazules, consistió en un triangular entre el Madrid, Español de Barcelona y Atlhetic.

En el equipo jugaba también “el portugalujo” mister Cockram, que en 1904 jugaría en el Atlhetic de Portugalete. La alineación de ese día como se ve en la foto inferior fue de Acha, L. Silva. Goiri, Cockram, Ansoleaga, A. de la Sota, Montejo, J. Astorquia, Cazeaux y Evans.

Al igual que lo había hecho el año anterior el Bizcaya el equipo había jugado el mes marzo en Burdeos contra el Burdigala, que les obsequió con un suculento banquete del que su nieta guarda el MENU. 

Eduardo Montejo falleció en 1962. Continuaremos...




 


 

 

martes, 29 de junio de 2021

RECUERDOS DEL OJILLO DE ANTAÑO. (4) LOS VECINOS DEL Nº1



Tras la última entrada de recuerdos del Ojillo, Pedro Llinares nos envía su colaboración con los vecinos que recuerda viviendo en el nº 1. 

Empezamos recordando los establecimientos que ocuparon sus lonjas, desde la carnicería de Angelita “la Navarra”, actualmente una imprenta, y la pescadería de Carmen, donde anteriormente estuvo un despacho de pan de “Andrés Miguel”.

En la lonja izquierda, tuvo su tienda de ultramarinos Angelines, que luego se la traspasó a Severino, personaje muy popular, buen cantante de boleros, y buen cocinero, que estuvo desde 1957 hasta su jubilación en 1992, en que la regenta Eloisa Toro.

En el primer piso de esta casa, recordamos en la mano derecha a la familia Zubizarreta, con sus dos hijos Jesús y Agapi, y en la izquierda el navarro de Mañeru José Iturgaiz García (1907-1979), que tuvo el popular bar JOSE en la calle Santa María (luego bar MOLI).

José estaba casado con Josefa Vila Unanue nacida en Ortuella, quienes tuvieron dos hijos Alfonso Carlos y Jaime.

En el segundo piso, recordamos, en la derecha, a Amelia Ruiz, madre de Fidel Ruiz Martín, y Carlota y Valentín Antuñano en la izquierda.

En el tercer piso, Laureano López y su hijo el recordado José Benito López Okariz (a la izquierda de la foto superior) y enfrente Andoni Aza (“Carota”) y su mujer Mª Luisa.

En el cuarto piso Emilio Elosua Gómez, y Milagros Gutiérrez, con sus tres hijas, Adela, Sofia y Dolores y sus dos hijos Emilio y Basilio. Adela se casó con Fidel Ruiz (“Cuscu”).

Finalmente en la mano izquierda, vivían la familia de Fernando Pérez y Leonor Martín, con su hija Leonor (maestra) y sus hijos Fernando y José Luis ( a la derecha de la foto superior), que actualmente con sus 97 años pasa todos los días desde Las Arenas, donde vive, a tomar sus chiquitos y que es el decano de los Amigos del Ojillo. Una foto de esta gente nos sirve para cerrar esta entrada.



lunes, 28 de junio de 2021

LA DEPORTIVA NAUTICA EN 1962: LA PRUEBA DEL 100 X 100

 


La foto que nos ha cedido Juanjo del Horno con el equipo de waterpolo de la Náutica que compitió en los campeonatos nacionales de 1962 en Sevilla, nos hace que siguiendo las indicaciones de Juanje Fuentes (Polvorilla) recurramos a  lo que escribió en aquel año de 1962 en el periódico Hierro, el que era presidente de la entidad Chelu Fernández, para recordar una curiosa competición como fue la del 100 x 100.

Empezaremos dejando constancia de  la composición de la Junta Directiva elegida en febrero de aquel año que era: José Luis Fernández Ruiz, presidente, Francisco Javier Ortuzar, secretario, José Manuel Loredo Mutiozabal, tesorero y Peio Basurco Aboitiz como contador. Vocales, José Antonio Babío (waterpolo), Norberto Buj Salvatierra, Antonio Aza Aragonés, y José Miguel Emaldi Lambarri.

La citada competición del 100 x 100 reunía a 100 nadadores de todas la edades y categorías que cada uno hacía los 100 m y tuvo lugar el último martes de setiembre, finalizando la temporada en la piscina que entonces era descubierta, que lo haría los días siguientes con el Torneo Tokio para juveniles e infantiles entre la Náutica y el Deportivo de Bilbao.

La crónica le atribuye la iniciativa a Javi Ortuzar, quien comprometió a casi 150 candidatos a participar, por si acaso, y con el crono en la mano dirigió la prueba.

El primer nadador se tiró al agua a las seis de la tarde y con perfecta organización fueron tomando la salida los demás que tenían que hacer tres piscinas para completar los 100 m. Los infantiles Begoña y Alberto Buj, fueron los primeros, finalizándola los tres hermanos Loredo, para cerrar la prueba Toño Babío, entrenador de waterpolo que con sus treinta y tanto años nadó estupendamente en braza dando una lección a los jóvenes, continuando Norberto Buj, y por último el presidente Chelu que lo hizo en 1-19-1recibiendo una gran ovación.

El Registro final 2 horas 46 m  6 segundo 2 décimas a 12 minutos de récord vasconavarro del Club Deportivo que tenía el record desde el año 1959 en 2 horas 34-38-9, se consideró muy aceptable, y un gran éxito para la Náutica que sólo disponía de piscina desde tres años antes.

Bajo estas líneas una de las fotos que Aurelio Gutiérrez ha divulgado desde su blog correspondientes a la obra del fotógrafo Germán Elorza, del Archivo Histórico de Euskadi.



viernes, 25 de junio de 2021

BIBLIOGRAFIA PORTUGALUJA: ENREDADOS EN LA LANA, DE JAVIER LÓPEZ ISLA

 


El libro Enredados en la Lana publicado por la Asociación de amigos de la Basílica, es obra de Javier López Isla, uno de los guías voluntarios de la Basílica que viene ejerciendo su actividad desde la creación del grupo en 2013. Es la Historia de las dos tablas flamencas que cuelgan de los muros de la Basílica y de las cuales no hay documentación sobre su autoría o de cómo llegaron a nuestra villa. El libro, de 219 páginas y 180 ilustraciones, va recogiendo en sus 34 capítulos, 2 Epílogos y un Tema Colateral, las investigaciones y hallazgos del autor a lo largo de estos años. En su labor de documentación se ha encontrado con personajes como Guiot de Beaugrant, su mujer y su hermano Juan, que desde su taller de Bilbao y con ayuda del vitoriano taller de Juan de Ayala, levantaron nuestro magnífico retablo mayor y nos relata su gestación.  El texto consigue probar que los dos cuadros se deben a la misma mano, al mismo taller, y la aparición en Francia y en Canarias de otros dos cuadros gemelos de los nuestros, ha supuesto abrir un conglomerado de incógnitas que el autor va desgranando y situando ordenadamente. A la vez que va describiendo de manera rigurosa las certezas que se han ido encontrado en el estudio de las tablas, de forma novelada  describe los personajes que van interviniendo en el proceso de creación, los talleres de Flandes con su febril actividad a mediados del XVI y la movilidad de los diferentes artistas que lo conformaban y el comercio de la lana burgalesa, que presidiéndolo todo, es la que propicia el desarrollo del argumento.   

El autor se sirve de un método empírico comparativo, persiguiendo detalles como los velitos, unas veladuras, que cubren la cabeza de la Virgen, para asignar los cuadros a la escuela de Brujas y tras el estudio de los paños  que visten, los dibujos de los brocados, nos introduce en el estudio de Ambrosius Benson uno de los talleres más representativos de la “guilda” de Brujas en ese periodo de mediados del Siglo XVI, presentando también a los marchantes, a su maestro Gérard David o a sus compañeros pintores, como Adrian Isenbrandt . También se especula con la desconocida labor de Marcellus Coffermans, posible autor de los cuadros gemelos.   

A pesar del estudio riguroso de las tablas, el texto es muy divulgativo y ameno y gracias a las numerosas imágenes que lo acompañan, se hace sumamente sencillo su seguimiento.


El libro ha sido patrocinado por el Área de Cultura del Exmo. Ayto. de Portugalete y se pondrá a la venta al precio de 7,5 euros, al enmarcarlo dentro de las actividades culturales de la ya inminente llegada del Portugalete 700 que todos esperamos.

Su presentación va a ser el día 29 de junio, martes, a las 19:30 en el Centro Cultural de Santa Clara, en un acto presidido por Gemma Escapa, presidenta de la Asociación de Amigos de la Basilica, Mikel Torres, alcalde de la noble Villa y Juan Manuel González Cembellín, director del Museo Diocesano de Arte Sacro de Vizcaya.   

Enredados en la lana aporta una colorida pincelada que esperamos sirva para hacer sentir a todos los portugalujos una honrosa armonía y conjunción con nuestra brillante Historia.



jueves, 24 de junio de 2021

RECUERDOS DEL OJILLO DE ANTAÑO. (3) SUS TIPOS POPULARES

 


Con esta foto de la gente del Ojillo a principios de los años 50, continuamos con los recuerdos de esa calle de Félix Hernández.

El Ojillo tenía sus tipos populares. En el nº 1 vivía el bien portado Laureano, hombre de clavel rojo, escribano del Ayuntamiento, gran aficionado a los toros y asiduo al bar Vicente.

Mariano del Pozo, fiel cumplidor de su droguería, que a precisión de cronómetro abría y cerraba su persiana todos los días, hombre de bata blanca que supo vivir este mundo con bondad y dejar huella de su existencia. Influyente y monárquico, nunca dio malos informes de vecinos perseguidos u oprimidos.

Galeana, bombero, enterrador y limpiachimeneas, hombre trabajador y dispuesto a todo, que despertaba al barrio el día de San Roque con sus estrepitosos cohetes.

Gorgonio, hombre del blusón azul, dueño del bar frente a las monjas, que vendía más en un solo día de San Roque o San Roquillo que todo el resto del año.

Málaga, barbero silencioso, verdadera armónica viviente que con su silbar armonioso recorría los bares de la Villa.

De todas las casas del Ojillo, fue sin duda el nº 13, la que albergó la mayor y más nutrida representación humana; fue un hervidero de gentes, todo un parlamento de la vida cotidiana. En este teatrillo de variedades, el actor principal fue Perrote y la vedette su hija Paqui, que era toda una hembra atractiva y desafiante, que no se libraba nunca de piropos y miradas indiscretas.

En esta casa, que siempre olía a exceso de habitabilidad, los bajos también eran viviendas y en el reducido portal, obraba un zapatero artesano, que era el animador de tertulias y el eco de noticias callejeras. Perrote era el vecino más popular, un tipo cómico-malhumorado, que todos los atardeceres regresaba a casa con media castaña y, escorado de beber, era cuando las pandillas de chavales le hacían rabiar; junto a Perrote vivían otras familias numerosas como: Los Barrios (Angel, Elías, Gabriel, el Negus, etc.); Pajares (Félix, Floren, etc.); Regina la sardinera, cuyas hijas menores Consuelo y Agapi, representaron una ideal casta femenina, nadie se atrevía a tomarlas el pelo, fueron dos mujeres de temple y coraje que nunca se acobardaron ante la pobreza e infortunio, todo un ejemplo de dignidad; Mari Flor la hermana de los fruteros; Fuensanta, la romántica y delicada novia, que hacia esperar horas a su amor acotado sobre las paredes de los Aromas; Rosa y sus hijos, entre ellos, Alfredo Bilbao, un joven divertido que no se privaba del alterne diario por los bares de Zamorilla, Minuto, Metro y Areso. En los bajos de la casa vivían, Eusebia de Novella, una auténtica etxekoandre, que siempre esperaba el retorno de los suyos, sentada en la acera haciendo punto; en otra mano Uvi Ortega, Miguelín y su hermana la monja vivían con su madre Eugenia, que siempre la vimos de luto soportando alguna pena inolvidable o drama familiar.

También en la casa nº 11 recordamos a la abuela Dorotea de Perrochico y a los Manzanares; a la misteriosa maestra “Filo-Tricornio”; a Emilita y Carmenchu Tejada, dos hermanas muy ordenadas que nos brindaron su buena amistad. En las lonjas se movían los Sirimiri y Pepa la carbonera; ésta tenía una burra, que estaba picada con el burro de Margaritetxu Aroma, la de la aldea de Lejona. Esta pareja de asnos cuando se encontraban, se ponían furiosos y era tal su frenesí, que nos daban un espectáculo circense.

Había en la calle otros tipos muy singulares como: Pilar la coja, Zoila y su hijo Andresito, de refinados modales, el bar de Gilda con su hija Evangelina y Alberto, la tienda de Florines, Trasviña, Alfonso Durán y otros muchos que algunos hemos olvidado por el tiempo.

 

miércoles, 23 de junio de 2021

APUNTES PARA LA HISTORIA DE LA NATACIÓN: LA TRAVESIA DE LOS EMBARCADEROS

 


En 1950 la Náutica empezó a organizar junto con la Travesía de Portugalete, de la que hemos hablado en otra entrada, la Travesía de los embarcaderos. Sería en el mes de setiembre los días 4 y 9. La prueba con una distancia de 800 m. consistía en un circuito en forma de cuadrado desde el embarcadero de la Plaza hasta el de Las Arenas.

En la II Edición en 1951, se anotó el triunfo Benjamín Espinosa por delante de la joven promesa portugaluja Chelu Fernández, mientras en féminas ganaba Mari Gutiérrez “la navarrica”. Espinosa que ganó numerosas travesías volvería a ganar en otras ediciones posteriores.

La foto que encabeza esta entrada facilitada por Juanjo del Horno, corresponde a la edición de 1962 donde estos cuatros nadadores de la Náutica y grandes amigos aparecen delante de las oficinas de los prácticos.

En esos años 60 la prensa recoge a otros nadadores portugalujos participantes como Miguel Loredo, Navarro, Landabaso, Alcalde, Francia, y mujeres como Parada, Moraga, Terrón o Juana Ponce.

En 1963 esta travesía empezó a sufrir problemas derivados del tráfico por la Ría.

Bajo estas líneas una foto de las piscinas municipales en su primera década, del archivo de Germán Elorza, con la zona de Peñota tras ellas en aquellos años.



martes, 22 de junio de 2021

LA DARSENA EN 1876 EN LA EXPOSICIÓN DEL SIGLO XIX

 


Continua en la Torre de Salazar la exposición de fotografías que con motivo del PORTUGALETE 700 permanecerá abierta todo el mes de junio.

Aprovechando la reseña de prensa haciéndose eco de la gran acogida de público, recogemos en esta entrada dos fotografías de


la dársena en 1876 obra de Telesforo de Errazquin (1838-1898), del que se habla en el nº 2 de TEMAS JARRILLEROS que sirviendo de catálogo de la exposición se puede recoger en la visita a la misma.

Solo una de las dos fotografías se expone en la exposición, dado que la misma es solamente una muestra de lo que existe, por lo que aprovechamos para mostrar aquí las dos. Había finalizado la guerra carlista, la torre de la iglesia quedaba desmochada, y en la superior se está edificando el chalet que serviría de vivienda al director de la Compañía del ferrocarril minero a Galdames, encima del cual, un poco a la derecha, sobresale el molino o la torre de Castet de la que tan pocas noticias tenemos.

Se había construido el primer cargadero de mineral mientras se procedía a rellenar el terreno donde se establecería la playa de vías de ferrocarril y en la dársena se había dragado solamente la zona que necesitaban los buques para entrar a cargar el mineral.

Al fondo en la Plaza ya estaba construido el Hotel de Manuel Calvo pero no así el actual edificio de ayuntamiento.


 

lunes, 21 de junio de 2021

MEMORIA HISTORICA: UN MENSAJE DE GRATITUD AL PUEBLO DE EASTLEIGH

  


Mañana martes tendrá lugar en el centro cultural Santa Clara, un acto enmarcado dentro de la recuperación de la memoria histórica, que incluye un sencillo recuerdo a nuestro desaparecido amigo TASIO, que tan gran gran labor realizó en este campo. Nos adherimos a este acto publicando el discurso del portugalujo Jesús Urbina el 7 de Marzo de 1.991, en representación de la Asociación de niños evacuados en 1937, durante el viaje que realizaron al pueblo que les acogió, que nos ha facilitado Alfredo Cobos

Señoras y caballeros, Sr. Alcalde, Sres. Concejales y en general a todo el pueblo de Easteigh, presentes y ausentes:

Después de 54 años trascurridos, al fin, tengo la agradable oportunidad de presentarme ante Vds. de parte de nuestro Delegado del Gobierno Vasco, Sr. Legarreta, aquí presente, de la Asociación de Niños Evacuados del año 1.937 y de todos mis compañeros vascos que conmigo han venido hoy aquí, para expresar mi profunda gratitud por lo indulgentes y pacientes que fueron con nosotros durante nuestra estancia en el campamento de Eastleigh en el año 1.937.

Por lo que a mi hermana Anita y a mi concierne debo decir que solo permanecimos en el campamento cinco·dias, sin·embargo existen algunas anécdotas que aun recuerdo: Después de aquella exhaustiva inspección medica a que fuimos sometidos el primer día conseguimos matar un apetito atrasado con un plato de arroz, que a mi me supo a genuina paella. Aquel pan cuadrado, tan blanco, con aquel olor lechoso tan agradable tan tierno y sabroso y la mantequilla, aquella combinación para mi fue el mas excelente y rico de los alimentos.

La cosa empezaba bien. Recuerdo que en otra ocasión me tropecé con una gran tienda de campaña, me colé dentro y me encontré frente a un montón inmenso de ropa limpia, especialmente jerseys de todos los colores. Pensé, todo esto para mi!. Estuve allí un buen rato probándome distintos jerseys. Yo me encontraba como Alicia en el País de las Maravillas. Salí corriendo para contarle a mi hermana la buena nueva.

Observé también, que las instalaciones sanitarias funcionaban bien, mucha agua potable, duchas,·y nunca olvidare aquel jabón rosado que olía a demonios pero que era de una eficacia total como desinfectante.

Así es que , al pensarlo, estos tres requisitos básicos e indispensables para una vida normal en tales casos, estaban resueltos con éxito: Alimento, Ropa y Sanidad.

Después de estas consideraciones, yo alabo el enorme esfuerzo que tuvieron que hacer los asistentes ingleses para disponer de todo el cuidado necesario en un campamento donde más de cuatro mil pequeños monos corrían a sus anchas.

Un día observé un gran autobús que allí permanecía con una cola de niños dispuestos a hacer un viaje. Yo pensé, he aquí una buena oportunidad para ver un poco de mundo, así es que agarré a mi hermana Anita y me acerqué a la fila. Fue un viaje placentero hacia Londres y recuerdo, al pasar por los pueblos, que había muchas banderitas colgadas en paseos y ventanas. Después me enteré que el motivo era la coronación del Rey Jorge VI.

Comenzaba para mi una nueva era en Londres con el Ejército de Salvación, pero esta es otra historia.

Poseo un informe completo con la narración de todas mis andanzas durante el tiempo que permanecí en Inglaterra como niño vasco evacuado y quisiera entregárselo al Sr. Alcalde de Eastleigh, como un regalo de gratitud a su pueblo, por haberse preocupado y cuidado de nosotros en una época de nuestras vidas cuando mas lo necesitábamos.

En aquel año de l.937 hubo otras expediciones de niños con destino a otros países tales como Rusia, Francia y Bélgica. Estoy seguro de que todos estos niños fueron bien recibidos y cuidados en sus respectivos destinos. Sin embargo, yo personalmente pienso que a mi me toco la expedición mas afortunada por haber escogido Inglaterra para nosotros. Este aserto lo fundamento en el hecho de que Inglaterra y Vizcaya han estado muy unidos en el comercio y ha existido esta hermandad durante muchos años de manera especial. Eran tan fluidas estas relaciones que cuando nuestras minas de hierro se encontraban en auge allá por el comienzo del siglo, era familiar el ver a una docena de barcos mercantes ingleses a lo largo de nuestros cargaderos de mineral en Bilbao, Portugalete, Baracaldo, Zorroza y Olaveaga. Normalmente como contrapartida nosotros también recibíamos aquel rico carbón de New Castle. Estos continuos viajes hizo que nuestro pueblo ribereño conviviera y se hiciera amigo de marinos ingleses. Se dio una circunstancia que yo recuerdo de haber visto en un bar cercano al cargadero de Zorroza, donde existía en su pared principal colgado, un retrato de la Reina Victoria de Inglaterra.

Como resultado de estos continuos tratos y contactos, se han heredado muchas palabras de "'muelle" que todavía siguen en vigor en Bilbao. Algunas de estas palabras son: guachiman" (Watchman), "pichicoma" (Eeach comber), chipichandle (Ship chandler), "Suepincol" (Swipe-coal),"Olrai" (Allright), "plentie monis" (Plenty money), "pegarle al trinqui" (to drink) etc.

En lo que atañe a los deportes, sabemos que el futbol inglés entró en España por Bilbao y Huelva. Hemos tenido varios entrenadores ingleses. La palabra "Athletic" sigue en nuestro Club y por todo el país se sigue con las palabras genuinas: córner, off-side, penalty, goal, etc. y no digamos las canciones que tenemos, el "its a long wayt Tiperary" y presumimos de cantarlo tan bien como cualquier marino inglés. Incluso en nuestra guerra civil los gudaris, nuestros soldados, adoptaron esta canción cambiando las palabras para hacerla mas popular y asequible a nuestra circunstancia.

No debemos olvidar la afluencia de señoritos vascos, hijos de los potentados de nuestras minas, que eran enviados a Londres a aprender el lenguaje por excelencia del comercio.

Ahora para terminar quiero relatarles una historia verdadera y conmovedora que tuvo lugar, imagínense la coincidencia, hace hoy noventa años. También fue un siete de Marzo de 1.901, a las 11,30 de la noche, los mas ancianos de la Villa de Portugalete aun recuerdan el naufragio del Vapor inglés "Avlona-London". Cerca de nuestra costa existía una larga y peligrosa barra , justo antes de enfilar dentro de la ría para alcanzar los cargaderos de mineral, la llamábamos la "barra de Portugalete". Para mayor desgracia, se levantó aquella noche una horrible tormenta del N".W., el capitán de dicho barco era el primer viaje que hacia a nuestro puerto. El "Avlona" fue arrastrado hacia la barra con tal fuerza que la caldera del vapor reventó haciendo que el barco se hundiera inmediatamente. Todo fueron bajas incluida la esposa del capitán. Un día después cuando amainó el temporal, nuestro buzo de la Cofradía de Pescadores de Portugalete, llamado Urrestarazu, se acercó con fines humanitarios a rescatar algún posible naufrago, y lo único que pudo rescatar de aquel triste acontecimiento fue la campana, que después llevó al Hospital glorioso para ancianos de Portugalete, donde está adecuadamente emplazada y venerada. Las monjas la tocan todos los días para sus rezos y como homenaje a los marinos naufragados de todo el mundo. Yo creo, que fue un bello gesto de nuestro buzo. Esta fue su última voluntad. Un famoso compositor de nuestra Villa dedicó una canción que recuerda esta odisea y que se titula “la campana del Avlona". Y esto es todo Sras. y Caballeros, muchas gracias por su paciencia.

Ya solo me queda levantar mi copa con todos Vds. en un brindis sincero para desearles la mejor salud y fortuna.

Dios les guarde a todos Vds. amigos ingleses.



 

viernes, 18 de junio de 2021

RECUERDOS DEL OJILLO DE ANTAÑO. (2) LAS FINCAS Y CAMPAS

 


La finca de los Aroma, servía en las fiestas de San Roque para celebrar su fiesta familiar y amistosa en un improvisado merendero instalado en ella, en lo que actualmente es la calle Gipuzkoa.

Haciendo pared medianera con dicha finca estaba la de Palacios, verdadera huerta con frutales tapiada totalmente, con una sola puerta de acceso por el Ojillo junto a la fuente y aquel banco de hormigón que sirvió durante muchos años de buen emplazamiento para el tablado musical de las fiestas de San Roquillo.

Continuando calle arriba, por la derecha estaba el callejón de las Monjas, que separaba la huerta de Palacios de la Residencia de las Siervas de María; este callejón de reducida anchura unía el Ojillo con la calle General Castaños a través de huertas y cortijos; luego más tarde la carretera Nueva (hoy Carlos VII) cortó el callejón en dos trozos: el del Ojillo sirvió de escape para ir al refugio del Lavadero de las Monjas, lugar seguro y tranquilo por aquellos años.

Pasando las monjas, en su misma mano y ya frente a la Campa de San Roque, existía la finca de Goitia, con su palacio solariego y su gran jardín, con frondosos y gigantescos árboles, finca muy particular que contrastaba con la “Campa”, la cual, abierta al esparcimiento popular, era la más grande y fresca del lugar que existía en Portugalete por aquel entonces.

En la campa, la ermita sencilla, humilde y sin ningún estilo arquitectónico a la sombra de los castaños y plátanos, se vestía de gala para honrar a su patrono San Roque, recibiendo a la mañana a la Corporación Municipal con su pueblo y despidiendo a la tarde a todos los romeros en su alegre y sudorosa “Bajada”.

La “Campa” seguía durmiendo bajo la buena vecindad de los Ruiz de Asúa, los Cobos y Banderas, familias que gozaron de la servidumbre de este lugar muchos años.

FELIX HERNÁNDEZ 

Las fotos de esta entrada de los fondos de Mari López Quintana, nos la muestran acompañada de dos amigas en la Campa de San Roque con su frondoso arbolado y en la inferior en las escaleras de entrada a la misma. La calle del Ojillo, quedaba encajonada en su parte alta por los muros de esta campa y los de la finca de Goitia que aparecen a la izquierda también con gran arbolado sobre los que sobresale la torre del convento de las monjas.



jueves, 17 de junio de 2021

Mª JOSEFA ORIOSOLO INZA (1914-1986): UNA PORTUGALUJA LA PRIMERA CONCEJALA DE GETXO

 


Roberto Hernández Gallejones que presentará esta tarde en el Centro Santa Clara la obra de Javier Campo, Saliendo de la invisibilidad. Retratos de mujer, nos indica que dentro de la obra que recoge la vida y experiencias de mujeres de Getxo, hay una portugaluja, que corresponde a Mª Josefa Oriosolo Inza.

Nacida en 1914 pertenecía por su línea paterna a una familia de marinos que en las últimas décadas del siglo XIX, encontramos en la lucha con los naufragios de la barra, mientras por la materna estamos ante un apellido relacionado con la hostelería que llegó a gestionar el Hotel de Manuel Calvo en el la última década del citado siglo cuando se llegó a denominar HOTEL INZA.

Su padre Constantino, abogado, ejerció durante más de 25 años como “fedatario público”,  y se casó con Mercedes Inza Bermeosolo en 1907, siendo sus dos últimas hijas, las mellizas Mª Josefa y Mª Carmen, que harían sus primeros estudios en el Colegio del Carmen. Posteriormente siguieron el bachillerato en las Clarisas de Durango, y al finalizar el mismo se trasladaron a vivir a Huelva donde se habían ido sus padres dada la actividad inversora en minas de su progenitor.

Al estallar la guerra civil fueron esas provincias del sur las primeras que cayeron mano de los sublevados, y fue allí donde ella con 22 años se incorporó como voluntaria  para ayudar a los heridos, descubriendo su vocación y adquiriendo los conocimientos básicos de enfermería.

Con la caída de la Villa vuelve a Portugalete a finales de 1938, y quizás sea una de las enfermeras portugalujas que se ofrecieron para cuidar a los heridos de guerra en el Hospital de San Juan Bautista y que vemos en la foto el día de su inauguración el 27 de noviembre.

Vivía en su casa familiar de General Castaños 22, cuando en 1941 un incendio la dejó reducida a ruinas, obligándola a trasladarse a casa de su familia en Algorta.

Ella que tras la contienda había convalidado sus estudios y conseguido su diploma de A.T.S. se colocó en el ambulatorio de Las Arenas, donde trabajaría hasta su jubilación.

Su persona ofrecía cierto aire progresista al ser una de las primeras mujeres que sacó el carnet de conducir, era soltera e iba a trabajar en Mobilette.

En 1966 la presentan en las elecciones a Concejales por el “tercio sindical” en representación de los técnicos sanitarios quizás intentando dar un ejemplo de aperturismo del régimen hacia la mujer, dado que en Getxo no había ocupado el cargo de concejala ninguna mujer.

En su labor intentó, dentro de sus posibilidades, influir en la mejora de atención médica dado su condición de enfermera y en 1974 cesó en su cargo tras siete años luchando en solitario contra las actitudes machistas de una corporación formada por personas enraizadas en la burguesía neguritica.

Murió en Logroño, a donde se había trasladado a vivir tras casarse cuando ya había cumplido los 60 años.

 

miércoles, 16 de junio de 2021

APUNTES PARA LA HISTORIA DE LA NATACIÓN: LA TRAVESIA DE PORTUGALETE

 


El recorte del periódico HIERRO, de los fondos que nos ha cedido Juanje Fuentes Santamaría (Polvorilla), con el recorrido de la XII TRAVESIA DE PORTUGALETE, en setiembtre de 1956, nos invita a recordar esta famosa travesía a nado que tenía lugar en la Ría en las décadas de los años 40 y 50 del siglo pasado.

De esta travesía que se había organizado por primera vez en 1942, ganando Guibemáu del Deportivo, con 1.250 m. de distancia, se nos dice en dicho periódico con motivo de su tercera edición:

En esta prueba dentro de las aguas de la ría, los nadadores tomarán la salida frente al embarcadero de los prácticos, virando la baliza situada debajo del Puente de Vizcaya, desde donde nadaran hasta la baliza situada en la Benedicta donde viraran (ambas por la derecha), tendrá su la llegada en el lugar de la salida.…”

Ganó Benjamin Espinosa, por delante de Enrique Anzola vencedor de la edición anterior y volvería a ganar otros años posteriores como fue en 1947.

En la reseña de la VI Edición de 1948 ganada por el madrileño del Club Canoe, Juan Manuel G. Zuloaga, se habla de 22 nadadores y una señorita, lo que nos indica que esta sería Mari Gutiérrez “la navarrica”, con una larga trayectoria de triunfos en la Travesía del Abra, desde la de 1939, 1942 o 1944, y que pondría también en esta su nombre en numerosas ocasiones.

En la travesía de 1951, encontramos ya citado a un portugalujo de 17 años que logró el 2º puesto y que fue José Luis Fernández CHELU.

Centrándonos ya en la edición de 1956, la organizó “por su cuenta y riesgoPaco Celaya, propulsor inigualable del deporte local, con la colaboración de un grupo de la Náutica como José Luis Fernández, Javier Ortuzar, y Javier Gárate.

Si fue muy bien acogida por los nadadores bilbaínos, no lo fue menos aquí donde ya la semana anterior una veintena de peques se habían apuntado y se entrenaban a diario en la Punta, consiguiendo un “récord de participación en ninguna prueba en Vizcaya”.

El recorrido, que según el dibujo de Paco partía de la playa y pasando por la Punta enfilarían hasta la Plaza frente a los prácticos, era de 1.650 m.

Los infantiles saldrán de “los canales” y su distancia será de 1.000 m. mientras a las damas se las bonificaría con 3 minutos.

La prueba que tuvo lugar al mediodía en pleamar, fue ganada por Jesús Rodríguez seguido de José Luis Cepeda del Deportivo y tercero el portugalujo Manuel Ortún.

La reseña señalaba que “la actuación de la Srta. Asun Navarro, quedando la segunda, con escaso entrenamiento, demuestra que hay materia prima”,


martes, 15 de junio de 2021

RECOGIDO DE LA PRENSA: UN SUEÑO DE LA VIEJA CUBA


La buena gente que ha hecho posible la Colección El Mareómetro ha investigado sobre sus huesos para reconstruir la historia de un edificio con vida. Aún hoy mantiene el esplendor que tuvo, ahora bajo el nombre de Gran Hotel Puente Colgante, uno de los emblemas más sobresalientes de Portugalete. La villa fue fundada en 1322 por María Díaz de Haro La Buena (el año entrante cumplirá los siete siglos de vida...) sobre una puebla documentada ya siglos antes, integrada en Las Encartaciones y habitada por gentes de mar asentadas al abrigo de su puerto natural. De la mano del actual director, Ricardo Campuzano, atracan las notas del mareómetro en esta crónica, reseña en la que dicen que "aunque el hotel no ostenta el nombre romántico que para él soñó Manuel Calvo, Casa de los pobres, sigue sirviendo a los fines humanitarios que el indiano pensó, a través de la Fundación que lleva su nombre y que ha actualizado el deseo de "con sus rentas repartir raciones de olla y pan entre los menesterosos". Entremos en la historia.

El 5 de diciembre de 1870 el citado Manuel Calvo adquirió el solar soñado, la primera parcela del Ensanche de la villa portugaluja. Siendo hijo de ese pueblo, Manuel no regresaría de manera definitiva a Portugalete hasta 1898, tras la guerra de la independencia de Cuba, donde había hecho fortuna. Regresó para vivir en su palacio de Portugalete (acabó de construirse a finales de 1871, bastante antes que el puente colgante que tanto nombre dio al municipio...) junto a dos sobrinas, un mayordomo alavés y una criada que se trajo del Caribe. Ya para entonces era propietario de una fonda y había donado cuatro farolas metálicas al pueblo que no había olvidado jamás.

Cuentan las crónicas que dos años después, en 1873, se instaló un cañón en la esquina sur trasera del hotel. ¿La razón? La guerra carlista que, sin embargo, no impidió la celebración de un baile en pleno estado de sitio. Con todo, el 21 de enero de 1874 se izó bandera blanca en la torre de la iglesia, en Santa Clara y en el rutilante edificio de Manuel Calvo. Ya era uno de los puntos cardinales de Portugalete.

Va quien esto lea encaminándose hacia finales del siglo XIX. En 1876 se construye un balneario en la playa (sí, para la gente más despistada o más joven: Portugalete tuvo playa...), dos años más tarde un nuevo cementerio y cinco después, en 1883, el actual Ayuntamiento. En 1887 la reina puso la última piedra en el Muelle de Hierro, un año después se inauguró el ferrocarril a Bilbao y en 1893... ¡el Puente Colgante!

A su llegada de Cuba por aquellas fechas, Manuel Calvo decidió crear un nuevo hotel a todo lujo en aquel espacio. No reparó en gastos. Encargó su dirección a don Pedro Botsio,  maitre d'hotel de la Compañía Trasatlántica y el 1 de junio de 1902 Portugalete fue testigo de una inauguración por todo lo grande. Dos años después, por recomendación médica, Manuel Calvo se iría a vivir a Cádiz, donde sólo estuvo dos meses antes de su fallecimiento.

El hotel pasó entonces a manos del pueblo portugalujo, representado en una Fundación dirigida por el alcalde de aquel entonces y el párroco de Santa María. Eran  los tiempos de la Belle Epoque y en el libro de registros de aquellos años, en los que se vivía ya el declinar de la playa y el balneario, están consignados un indiano portugalujo, Gregorio Uzquiano, de monumental fortuna, y la familia imperial austriaca, con la emperatriz Zita Borbón y Parma a la cabeza, en 1922. También Alfonso XIII organizó en aquellos salones grandes fiestas.

La popular cofradía de San José, verbenas y bailes de sociedad, bodas y carnavales y el que fue tan renombrado concurso del Vestido Barato fueron algunos de los usos de la época hasta que se cruzó otra negra sombra: la guerra civil. Se convirtió entonces en la sede de la Marina Auxiliar del Gobierno vasco, sufriendo serios destrozos que auguraban el final de la época. El hotel caía herido de muerte.

Entramos, por tanto, en la tercera vida del hotel, restañado de todas sus cicatrices de guerra tras una reconstrucción que pasó por manos de Santos Zunzunegui. Vuelve el esplendor y lo mismo se ruedan películas que se aloja la selección española de fútbol. Regresa el original Concurso del Vestido Barato, se alojan rostros conocidos y van sumándose a la fiesta las celebraciones, las bodas y bautizos, los bailes de carnaval y la vida social de Portugalete en pleno, hasta el punto que el mismísimo Elai Alai llegó a acomodar en él a los participantes en el Festival Internacional de Folklore... ¡cuando ya estaban cerradas sus habitaciones!

Detengámonos un poco antes, cuando Antonio Saloña llegó a la dirección del hotel en 1951, puesto que ocupó hasta la fecha de su muerte, veinte años después. Su figura no puede desligarse del hotel, hasta el punto de que no se olvida el libro que escribió, Arte nuevo de la cocina española, para regalar a los huéspedes. Un asiduo de las tertulias que allí se celebraba, Manuel Llano Gorostiza, le escribió la introducción. Pero eran años de dificultades y a la muerte de Antonio, en 1971, el estado del edificio no aguantaba ya el trajín del hotel, reconvirtiéndose en bar y restaurante hasta el 20 de septiembre de 1991, día en el que cerró sus puertas.

¿Se cantó entonces el gori-gori? No, Una empresa entró en puja con la idea de firmar un contrato de 70 años pero el 29 de julio de 1993 un pavoroso incendio lo redujo a cenizas. Durante años Portugalete miró al solar vacío como se mira una cuna huérfana, con el dolor de haber perdido un hijo. Incluso la Fundación Manuel Calvo, que gestionaba el legado del indiano, rescindió el contrato firmado con aquella empresa y buscó un nuevo socio, una nueva propiedad que trajese aliento nuevo para el siglo XXI. Ahí entran en escena Esteban Martínez y Javier Clemente, quienes traen consigo un soplo nuevo. La actividad del restaurante, que había cesado en 1991, se retoma en 2002, tras la hermosa reconstrucción que ha mantenido el aire colonial que trajo de Cuba aquel pionero Manuel Calvo. Ese mismo año el hotel abría sus puertas.

Hoy en día el Puente Colgante Boutique Hotel, que tal nombre gasta, luce y reluce, bañado con tintes de amarillo, verde, azul y gris, los colores coloniales tan reconocibles en Cuba. Su gastronomía se ha convertido en una clara referencia en la villa, con el restaurante La Habana como bandera. Y al encontrarse en la ruta del camino de Santiago, ofrece a los peregrinos cuidados de hospedería de altos vuelos. El Puente Colgante con el que se abraza recrea una imagen de elegancia, como si fuese un cuadro del ballet del Bolshoi. El 21 de junio de este año, si hacen cuentas, se celebrará el 150 aniversario del edificio original. Aquella pasión siguen en pie.

Jon Mujika
DEIA 13.6.2021



lunes, 14 de junio de 2021

COMERCIOS DEL CASCO HISTORICO. LOS Nº 12, 14 Y 16 DE LA CALLE SANTA MARÍA

 


Encabezamos esta entrada con la foto de las casas donde se ubicaron los comercios que recoge el estudio de José Luis Garaizabal, con su colorido actual, a la que hemos añadido las fotos de dos personajes que desarrollaron aquí su actividad como fueron José Ignacio Álvarez, el popular “Natxo” y el zapatero Eusebio Ruiz, cuya foto nos ha sido facilitada por su nieta Itxaso Gil Ruiz.

En la casa inferior, la nº 12, en las primeras décadas del siglo XX estuvo la casa de viajeros LA AMERICA, de Rafael Barandica y en el Anuario de 1922 ya se anunciaba Polonia Domínguez. POLONIA que estaba especializaba entonces en un “inmenso surtido de gabardinas”, “trincheras para caballeros, señoras y niños” se trasladaría en años posteriores a la calle del Medio.

En los años 30 tuvo una cacharrería Pilar Lambarri, y tras la guerra, durante la dictadura, en sus locales desarrollaron su actividad diversas asociaciones como Acción Católica, JOC Juventud Obrera Católica, HOAC Hermandad Obrera de Acción Católica, el Grupo de Montaña GANERANTZ, ELAI ALAI OAR, la Asociación de Familias, la Ikastola Francisco Xabier (ELAI ALAI) y el grupo de “okupas” Ametts Giza-Lokala.

En la actualidad está el TXOKO TXALAPARTA de la familia Rueda.

En la siguiente casa del nº 14, en la que se recuerda que llegó a haber una agencia funeraria, estuvo ultramarinos FLORA (1915) y el taller de compostura de zapatos, como nos muestra el anuncio, de EUSEBIO RUIZ (que también era un gran zapatero de confección a medida) y que recogemos junto a su foto.

También en las primeras décadas del siglo pasado estuvo la hojalatería de DANIEL TEJADA antes de trasladarse a Coscojales.

Más modernamente, hasta su cierre en el año 2000, el más recordado y que también aparece en la foto, es NATXO con su establecimiento de golosinas y “de todo”.

En la casa superior, el nº 16, tuvo su taller de pinturas LORENZO LORENTE antes de que se explotara como taberna, primero el bar LA VIÑA P. (Polvorilla) y luego el bar ESPIÑA.

Tras una época en la que TOMASA ZARANDONA, tuvo su tienda de alimentación, volvió a ser dedicado a bar, primero disco-bar y luego pub ZIABOGA.

Aunque primeramente compusimos como ilustración de esta entrada una fotografía antigua que luego desechamos, finalmente decidimos incluirla ya que nos muestra un cambio importante en esta parte de la calle Santa María con el muro que cercaba el terreno de los Salazar.



 

 


sábado, 12 de junio de 2021

MARIA DIAZ DE HARO YA TIENE NUEVO ROSTRO

  


Con motivo de iniciarse la marchas atrás del último año del PORTUGALETE 700, ayer se presentó la primera pieza de la pareja de gigantes que acompañaran a los cabezudos portugalujos, y que correspondió a la giganta con la figura de la fundadora de la Villa, María Díaz de Haro.

La obra ha sido realizada por el artista navarro Aitor Calleja.



viernes, 11 de junio de 2021

ANSELMO ZURUTUZA OLANO, (1801-1852), INDIANO EN MEXICO, ENPORTUGALETE.COM

 


Hoy que empieza la marcha atrás del reloj que marca los últimos 365 días que faltan para que la Villa cumpla sus 700 años, traemos a uno de los portugalujos que vivió hace dos siglos y que formó parte de aquella pléyade de portugalujos que eligieron las tierras americanas para desarrollar su futuro.

Nacido en Bilbao, pasó su niñez en la Villa y ya en su juventud emigró a América donde empezó arrendando un ingenio azucarero que luego completó con otro en Aculco, donde llevó a un sobrino, Lucas Zurutuza, (nacido en la Villa en 1822) que luego sería su heredero.

Pero el gran renombre que adquirió en México, donde se le considera como uno de los iniciadores del trasporte y las comunicaciones, fue por su contribución al desarrollo de los mismos con una empresa de diligencias que ponía en comunicación las principales zonas del país. Con la concesión de reparación de caminos, peajes y el transporte de correos para financiar la mejora de caminos, extendió las rutas en todas las direcciones, e incluso abriendo nuevas. En una época de frecuentes guerras civiles y bandolerismo, creó un sistema de transporte completo, con casas de postas, estaciones y fondas.

Además se preocupó por la enseñanza de la juventud, y en 1843 financió en las escuelas del estado de Veracruz la instrucción de idiomas (francés e inglés) y la educación de los niños, mandando contratar en Vizcaya un maestro de primeras letras para lo que ofrecía “el capital que fuera necesario utilizar”.

Tras un viaje a Europa, en 1845 creó una Fundación en Portugalete, para mantener una Escuela de Náutica y Francés, siendo nombrado por el Ayuntamiento Primer Síndico honorario.

En 1850 adquirió el Palacio Iturbide, (hoy en el centro histórico de la ciudad de México) donde inauguró el lujoso Hotel Diligencias, como punto de donde salían y llegaban las diligencias puntualmente.

Tras su muerte sus restos descansan en el Panteón de San Fernando de la capital, y la escuela fundada en Portugalete dejó de recibir fondos.

Sobre este personaje y su  obra la Escuela de Náutica y Francés, recomendamos consultar en la Biblioteca Digital el trabajo de Roberto Hernández Gallejones y recordamos para los interesados en estos portugalujos que ayudaron al desarrollo del continente americano que son muchos los que se recogen el el Diccionario Biografico Portugalujo, que el igual que la citada Biblioteca se abren pinchando las diversas pestañas que encabezan este blog.


 

 


jueves, 10 de junio de 2021

GENTE PORTUGALUJA: LOS SAN SALVADOR

  

Como hemos comentado en repetidas ocasiones la Colección El Mareómetro ha llegado a su fin a la espera de publicar el próximo año su último libro, Diccionario Biográfico Portugalujo, con unas 300 fichas de personajes que se pueden consultar en este blog donde se recogen provisionalmente y casi la mitad van apareciendo en el periódico enportugalete.com.

Hay quien nos indica su decepción por incluir a algunos o por no incluir a otros, riesgo que corre todo autor que acomete una empresa de este estilo con una idea y  estilo determinado.

Como se nos ha señalado otro blog portugalujo sobre historia, Monografías Históricas de Portugalete, como fuente para encontrar muchos personajes dedicamos esta entrada a recoger uno de los que apareció allí con el título de MANUEL SALVADOR, RECONOCIDO PILOTO Y MECÁNICO DE AVIACIÓN EN EL SIGLO XX, NACIDO EN PORTUGALETE.

Este blog cuyo link incluimos entre los enlaces recomendados empezó a funcionar en octubre de 2008 y estuvo activo hasta diciembre de 2018, llegando a alcanzar en esos 10 años 400.000 visitas. Como creemos que fue una aportación para conocer a la gente que nos ha precedido en esta Noble Villa procedemos a su transcripción, al margen de que encajen o no en nuestro proyecto: 

“Nacido en 1910 desde muy joven Manuel se interesó por el mundo de la aviación siendo uno de los más reconocidos mecánicos de vuelo de su época. Trabajó en la línea aérea Iberia consiguiendo una notable formación en este campo gracias al gran número de cursos que realizó durante su carrera profesional, muchos de ellos en Estados Unidos, país puntero en este medio de comunicación. Uno de estos cursos lo recibe en Los Ángeles en marzo de 1954, siendo elegido entre los mejores técnicos de la compañía para formarse en EEUU durante cinco meses.

Años antes (1947) formaba parte de la primera tripulación de Iberia en cubrir en vuelo la República Argentina con España, siendo así uno de los escogidos miembros de la nave que trasladó a España a la esposa del presidente de la nación Argentina Eva Perón en su famoso viaje del pasado siglo.

San Salvador fue en vida uno de los más reconocidos pilotos mecánicos de su época desarrollando la mayor parte de su carrera profesional dentro de la empresa Iberia”. 

Ilustramos esta entrada con la foto que incluye dicho blog de uno de los cursos en que asistió, a la que añadimos, recurriendo a las fotos de portugalujos que nos facilitó Eduardo Benito, su foto acompañado de la de su hermano Luis (izquierda) quien nos señala que nació en 1910 y en 1935 empezó a ejercer de médico en Ibarrenguelua y a la derecha la de su otro hermano, Angel, que trabajó en BILTOSAN.

 

miércoles, 9 de junio de 2021

HACE 70 AÑOS EL WATERPOLO PORTUGALUJO ERA EL MAS FUERTE DE BIZKAIA

 

 

Este programa del Club de Natación Judiz-Mendi de Vitoria, que nos ha facilitado Juanje Fuentes Santamaría, además de la información correspondiente, nos sirve para rememorar los años en que los nadadores del equipo de waterpolo de la Náutica de Portugalete, eran líderes indiscutibles de Bizkaia en pugna con sus únicos rivales del Club Deportivo de Bilbao.

Cuando en 1948 se constituye la Náutica, encontramos en la prensa de la época a los portugalujos jugando contra el Club Deportivo en la Punta y curiosamente en la travesía de Plencia finaliza en el puesto nº 13 Javier Zaldua figurando que pertenece al equipo con el nombre de PUNTA MUELLE.

Al año siguiente el 7 de setiembre de 1949 nuevamente se vuelven a enfrentar, dentro de la Liga organizada por la Federación de Náutica, en la Punta acabando en empate, teniendo la semana siguiente su revancha en la Final, dentro de la Quincena Náutica de Bilbao, que ganarían los portugalujos por 4 a 3, cuya entrega de premios tuvo lugar en el Ayuntamiento de Portugalete.

En 1953 Coincidiendo con las fiestas de la Blanca el Club Judizmendi organiza un "macht" cuadrangular de natación y waterpolo, invitando a la Náutica que había sido campeón de Bizkaia los dos últimos años. Era su primera salida y su alineación figuraron: Babío, Amezaga, Oñaederra, Irala, Zaballa y Fernández. Ganaron los vitoriano y la Náutica Subcampeón.

Durante las fiestas de Bilbao se celebró el Campeonato de Vizcaya de waterpolo en el Deportivo, con solo dos únicos equipos participantes, ganando fácilmente la Náutica con las gradas llenas de seguidores por 10-6.

Equipo lo formaron :

José Antonio Babío (capitán), Javier Gárate
(sustituido por Chelu Fernández), Gerardo Sarralde, Manuel Molini, José Miranda, Santiago Irala y José Mª Molini.

Tras estos años de gran calidad en nuestro waterpolo, vinieron unas temporadas en que fue decayendo, encontrando en 1958 la noticia de que había desaparecido.

Bajo estas líneas la situación del campo de juego en la Punta del Muelle, situado entre las escaleras de las Chicas y las escaleras de los Chicos.



 

martes, 8 de junio de 2021

RECUERDOS DEL OJILLO DE ANTAÑO. (1) LAS INDUSTRIAS

  


Recogemos en sucesivas entradas los recuerdos de sus años de niñez, en torno a la guerra civil, de Félix Hernández, que dejara escritas en la revista el Abra de hace 50 años.

La calle del Ojillo era en aquellos años una calle muy singular, que comenzaba en la vía del tranvía e iba hasta la campa de San Roque junto a la huerta de Petra.

A la entrada del Ojillo lo primero que se veía era la panadería de Menés, muy popular, al igual que la de Salvadora y Florentino, que con sus viejos carros cubiertos recorrían y repartían su rico pan elaborado en aquellos hornos calentados con leña de borto; aquellos carros sirvieron en muchas ocasiones de solaz diversión a la chiquillería del barrio.

De aquellas panaderías pasamos a las fábricas de gaseosas de Sirimiri y del Nervión (antes y después Berriatua). Estas industrias un poco más mecanizadas, alternaban en el reparto diario de su refrescante producto. Unas veces con sus clásicos carros abiertos y otras con sus camionetas de arranque manual, un tanto descacharrados, que más de una vez hicieron sudar a sus conductores. Fueron fábricas pioneras en sus fabricados de limonadas y naranjas de las que nos queda el recuerdo de sus magnates, Tachuela y el Señorito.

No podemos olvidar a los talleres metalúrgicos de Pradas emplazados antaño frente a las gaseosas del “Nervión” y junto a la agradable sombra de aquella gran morera que vegetó al lado de la huerta de los Aroma.

Los Aroma, que vivieron también en el Ojillo, junto a la finca que dedicaban para obrador, depósito de materiales de construcción y huertas de labor, fueron pioneros de albañilería en la Villa.

          



lunes, 7 de junio de 2021

COMERCIOS DEL CASCO HISTÓRICO: LOS Nº 18, 22 Y 24 DE LA CALLE SANTA MARIA

 


Continuando con el trabajo de José Luis Garaizabal recogiendo todos los establecimientos comerciales que han existido en el Casco Histórico, nos centramos en los números altos de la calle Santa María, los números 24 y 22 separados por un solar vacío del 18 y que aparecen en la foto superior actual, que adquiere colorido con las sombrillas repartidas por los jardines de Salazar.

En la casa nº 18, restaurada modernamente y que como vemos en la foto inferior de 1980, antes solo tenía dos alturas, en las primeras décadas del siglo pasado en su planta baja se vendía carbón. Así se recuerda a IGNACIA ELERRI (debajo de las escaleras), la carbonería de SOLE Y VALENTÍN, en 1925 (como nº 22) el despacho de carbón de JOSE ELORZA o la carbonería de PILAR URIAGUERECA, así como también la carbonería de MERLADET.

Eusebio Santa María (Polvorilla) antes de que adquiriera fama en su actual emplazamiento, cogió la taberna que se arrendaba en el nº 22, junto a la carbonería y en 1924 pasó al 18.

También se nos dice que EMILIA MANTECON tuvo un almacén de ropa de agua, (sin comprobar), y después estuvo el criadero de champiñones ADAN y también en él VILLANUEVA “el manco” arreglaba máquinas de coser.

En el nº 22 donde actualmente está el bar ESTATXA, que extiende las citadas sombrillas de la foto, tuvo hace un siglo su taller de hojalatería, con tienda también en la calle del Medio, INDALECIO NAVARRO. Posteriormente (en 1928) encontramos Frutas y hortalizas MARCELINO LOZANO y un almacén de pinturas.

Ya en tiempos modernos hasta llegar al actual bar café, empezó el disco-bar SEÑUELA, o ESTATXA, y la degustación Café-bar LA BASILICA.

Finalmente la casa superior de la calle que hace esquina blasonada con el cantón de la Iglesia, y de la que se decía que pudo albergar en un momento dado la cárcel de la Villa, en su primer piso estuvo la estafeta de Correos y en sus bajos se degustaba el txakoli de Olaso con entrada por el Cantón.

A. ELORZA tuvo su almacén dedicado a andenes, aceras, rebollos y alquiler de GOITIBERA para trasportes, utilizándose después como carpintería con entrada por el portal. En 1938 aparece como carpintería de JOSE Mª NEGRETE con entrada por la travesía de la Iglesia. Tras estar dedicada a Artesanía de cestería, desde hace décadas se encuentra recambios RELSA.