Siguiendo
como dijimos ayer con la casa de Ibarreta, situada al final del muelle Viejo,
recurrimos a un detalle fotográfico, ampliando una conocida foto de 1900 que ya
se ha publicado en numerosas ocasiones desde que la rescatamos del archivo de
José Lecue, en el primer libro de Portugalete
en la fotografía.
En
primer plano, el remolcador de ruedas Volador, y tras su chimenea la casa de
Ibarreta, que décadas antes se conocía como la de Uhagón.
El
bilbaino Manuel Antonio Uhagón (n. 1798) que llegó a ostentar el cargo de
Diputado General de Bizkaia, estaba casado con Mª Dolores Vedia (n. 1809) y en
esta casa tuvieron a sus dos hijos, Isabel y Enrique. Mª Dolores Vedia
Goosfens, que vivió una parte importante de su vida aquí, es conocida por ser
autora de varios libros de cocina, hoy muy valorados, “La Mesa española. Arte
de cocina al alcance de una fortuna media” (1887), y Libro de cocina a
propósito para la mesa vizcaína” (1903)
La
primera de sus hijas, la portugaluja Isabel Uhagón Vedia (1832-1893), casada
con el famoso ingeniero Adolfo Ibarreta Ferrer fue la madre del explorador y
aventurero Enrique Ibarreta Uhagón (1859-1898). En estos años de final del
siglo XIX los portugalujos se referían a dicha casa como la de “Ibarreta”.
En
el plano de la derecha del final del muelle Viejo, del AHMP, facilitado por
Jose Luis Garaizabal, con dicha casa aparece la firma de Adolfo Ibarreta, que en 1873 era Ingeniero Jefe de Obras Públicas de Bizkaia.
Siguiendo
con el detalle fotográfico, nos muestra a la izquierda el edificio que la Junta
de Obras del Puerto había construido en terrenos del antiguo terreno de Villar
y entonces propiedad de la Compañía del ferrocarril a Galdames, para instalar
las máquinas motrices y dinamoeléctricas para el servicio de luz eléctrica de
la ría desde el final del muelle de hierro hasta la desembocadura del Galindo.
Este servicio se inauguró casi a la par que el mareómetro, hace 130 años, el 15
de octubre de 1883.
A la derecha del remolcador la primera
estación provisional de ferrocarril que dejaría de prestar su servicio el 25 de
mayo de 1890.
En la parte central superior de la foto la
“cantera de la Atalaya” donde se extraía piedra caliza para mampostería, donde
había dos propietarios Luis de Salazar y Secundina Ibáñez, aunque ninguno de
los dos la tenía en explotación.
Dos comentarios sobre la foto:
ResponderEliminarNombras a dos propietarios y dices que ninguno de los dos las explotaba.
Hay un expediente en el AHMP(C095-037) de 1882 , que nos dice como la Diputación comunica al Ayuntamiento que ya ha dado orden verbal a BERNARDINO ITURBURU, como explotador de la cantera para que haga desaparecer “una peña que por las circunstancias de su situación y forma saliente, constituye una amenaza de caída sobre la carretera”. Por lo tanto ahí tenemos un arrendatario.
El otro comentario que te quería hacer y no sé si lo tratarás en otra entrada, es el molino de viento que existió sobre la cantera del que tal vez sean sus ruinas las que se ven sobre la colina.
En los planos de la guerra carlista se puede ver como se menciona la CORTADURA DEL MOLINO y sabemos por el documento que me envió Alex de la Asociación del Colegio del Carmen, que entre los bienes de Sotera de la Mier que dejaba a las monjas, estaban “las heredades del molino de viento”.
(También es mi voluntad que las heredades de molino de viento y frente desde el frontón, queden para siembra de pastos para el ganado del colegio de Ntra. Sra. del Carmen y para que se cumpla como mandato mío lo firmo a 13 de marzo de 1900. Sotera de la Mier).
Jose Luis Garaizabal
Entre mis fondos tengo otra edición distinta de la que pones del libro Arte de Cocina de Dolores Vedia y la partida de bautismo original, de 2 de julio de 1832 de Isabel Dolores Petra Uhagón y Vedia, donde señala que sus padres legítimos Manuel Antonio y Dolores, eran vecinos de la Villa. Sus abuelos eran de Hasparren (Francia), por parte paterna y de Montevideo por la materna.
ResponderEliminarSu padrino era Pedro Francisco de Gorospe, tío materno, teniente coronel de artillería de los reales ejércitos y secretario de S.M.
La bautizó Gregorio Antonio de Villar, presbítero, cura beneficiado de la iglesia parroquial de Santa María, de la que se habló en la entrada de ayer.
Txomin Hermosilla