viernes, 9 de abril de 2021

FELIPA BARANDICA (1873-1934), LA COCINERA DEL SPORTING

 


Estamos ante una mujer sencilla, que alcanzó el máximo reconocimiento personal como cocinera del Sporting Club. Felipa Barandica Muniátegui nació en Ajangiz en 1873, siendo la pequeña de cinco hermanas. Cuando contaba con 9 años, sus hermanas mayores se desplazaron a Bilbao a “servir” en casas pudientes. Ella se quedó en Ajangiz con los padres hasta que llegó la hora de unirse a sus hermanas. Modesta, la mayor (1861), acabó casándose con José Uranga, bisabuelo de los Uranga de Mocedades. Felipa recaló en Santurce sirviendo, al menos, en una mansión de la carretera de Portugalete a Santurce en la zona conocida como del “cambio del tranvía” y suponemos que en Santurce conocería al portugalujo Cruz Fernández Zuazo, afincado en Coscojales (Santurce) del que ya hablamos al estudiar la imagen de San Crispín que conservó expuesta en el exterior de su casa y que como ya contamos, no ha sido posible localizar.

Cuando recibimos de Unai Martínez Bilbao las fotocopias de los Libros de Actas y Cuentas de la Cofradía de San Crispín y San Crispiniano, también recibimos unas fotocopias de un libro contable “Mayor” y una agenda de 1902, ambos manuscritos con distinta letra, con más de un centenar de recetas de cocina. Ahora sabemos que se trataban del recetario de Felipa.

La buena gestión de Josemari Ruiz además de aportarnos la foto de la cocina, nos puso en contacto con la nieta de Felipa, la santurtziarra aunque portugaluja de adopción, Anatxu Esturo, que junto a la biznieta de Felipa, Greta Fernández, nos han facilitado las fotos y datos para esta pequeña biografía. Greta aún conserva el recetario original y los libros de la Cofradía, que recogeremos en la Biblioteca Digital Portugaluja.

En la fotografía superior, podemos ver a la tripulación del Sporting, siete mujeres y cinco hombres, comandada por Felipa que es la que se encuentra junto al camarero de la chaqueta blanca. Entre ambos, su hijo José Eusebio, “el chato” (aitite de nuestra informante Greta); su marido, Cruz, no aparece en la foto aunque trabajaba como botero entre el Sporting y tierra; y sosteniendo la cafetera, otra hija de ambos, Manuela, ama de nuestra otra informante, Anatxu. Del resto poco sabemos, salvo que uno de los marineros se llamaba Roque y se dedicaba al palangre y al marisqueo. En el “Libro del Sporting Club” del Conde de Zubiria se da la relación de empleados en 1903, citando al contramaestre Jesús Laca, a Melchor, Cruz, Vicente, Liborio, Ambrosio, Amézola y otros dos, seguramente eventuales. En esta foto, falta el mayordomo, Gabino Carrasco, que solía subir sudoroso la calle San Roque, vestido con su frac, dirección a su casa de Abatxolo.

En la cocina destacan al fondo los dos ojos de buey con dos ventanas bajo la cubierta principal y sobre ellos la gran viga metálica con multitud de remaches, así como la “chapa” de carbón y su chimenea metálica que coronaba el toldo de la cubierta superior. Esta cocina, se instaló en el club tras la primera ampliación de 1909, lo que nos hace suponer que fuera entonces, más o menos, cuando contratarían a Felipa por recomendación de Cruz. No eligieron mal. De aquella cocina disfrutaron los socios y visitantes, entre los que destacaban, como no, el rey Alfonso XIII y la reina Victoria Eugenia.

Mujer seria y callada, hablaba con dificultad el castellano, pero dejó en los socios un imborrable recuerdo. José Mª de Areilza en sus “Recuerdos de Portugalete” (Col. El mareómetro, 1998), habló de ella así: “Tenía el Sporting cocina exquisita regida por Felipa, con repertorio básico de merluza frita, jibiones, sardinas, bacalao y pimientos rellenos. Un programa bilbaíno regado por caldos riojanos. Dos marineros sólidos, Cruz y Jesús, cuidaban de las embarcaciones y del trabajo organizador del regateo. Jesús, era, además, experto universal, modelista naval, y a ratos perdidos, inventor de ingenios volantes. El bar tenía un aire cosmopolita e internacional, con el impecable Gabino y su ayudante, eficaces y discretos, a la manera británica”. También añadía al referirse al rey: “A veces renunciaba a los platos rimbombantes del menú para pedir huevos fritos con chorizo o merluza con salsa de chipirón, que le entusiasmaban”.

A ese recetario básico, iría añadiendo Felipa el resto de recetas que aprendería de cocineros de postín, por ejemplo, el cocinero del yate real Giralda que solía fondear junto al Sporting. Según cuenta la familia, en una ocasión bajó el rey a felicitar a Felipa y recibió, según una versión, una cafetera de regalo y según otros, una gratificación monetaria.

A estas pinceladas hay que añadir que el Club había acordado en 1902, “conceder al personal, en invierno, un día de vacación, en domingo”. Nos cuentan igualmente, que la rectitud de Felipa llegaba al punto de pagar, a veces, de su bolsillo lo que se había encarecido algún producto básico desde la última compra.

Su biznieta, Greta, además del recetario, conserva una medalla de las Regatas Internacionales de 1902 que alguien les regaló tras las mismas y que ofrecemos bajo estas líneas.

La Gaceta del Norte de la época nos señala que “se celebraban ‘maitines’ en el salón flotante, que en la mejor tradición de la casa, que entonces se empezaba a crear, serían unas juergas místicas de mucha consideración”. Aquel club monárquico y elitista de los Arana, Aznar, Careaga, Zubiria, Gandarias, Galindez, Allende, Chávarri, Ybarra…, cuya sede servía de cuartel general de las regatas a vela, remo en yola, natación y saltos de trampolín, vio perder su brillo en 1930, año de la última visita real, cuya puntilla fue la proclamación de la república al año siguiente, planteándose los socios su disolución o hundimiento. Al final, acordaron en 1933 trasladar “las viejas tablas” a Arriluze con los consiguientes cambios estructurales (fondeo, alimentación eléctrica y teléfono). Un temporal en 1980 lo echó a pique.

Felipa falleció en Santurce a los 61 años de edad, la víspera de Santiago de 1934 y Cruz a los 83 años en 1960. 

En la siguiente entrada nos centraremos en su recetario.

José Luis Garaizabal




 

 

 

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