viernes, 30 de agosto de 2013

CUESTACIONES Y SUSCRIPCIONES EN LA POSGUERRA




Durante los primeros años después de la guerra, el Régimen franquista no disponía de medios económicos para mantenerse y dedicó todo su esfuerzo en conseguir dinero de la población además de los impuestos. Estos fueron los medios que se utilizaron en la villa.
-Venta de unas papeletas por parte de las chicas que estaban haciendo el Servicio Social para recoger dinero para “Auxilio Social”, al principio llamado “Auxilio de invierno”. Este último organismo era también el responsable y el beneficiario de los famosos “emblemas”, que recordarán los lectores que rondan los 70 años. Todos los asistentes a algún espectáculo (cine, teatro, fútbol, toros, campo de deportes S. Roque, etc) tenían la obligación de comprar, además de la entrada, un escudito de cartón o de metal y ponérselo en la solapa para poder entrar. Se vendían en las taquillas y en los bares. Reproduzco el anverso y el reverso de una colección de emblemas.
-La Fiesta de la Flor, organizada por el Patronato Nacional Antituberculoso.
-Cuestación “Pro Centenario de la Santísima Virgen del Pilar”. Ignoro qué finalidad tenía el dinero recaudado.
- “Día de la banderita” de la Cruz Roja el día de Santiago, patrón de España.

Tasio Munarriz


jueves, 29 de agosto de 2013

PROGRAMA DE FESTEJOS DEL MES DE SETIEMBRE DE HACE UN SIGLO



Terminamos hoy de mostrar el programa de festejos de hace un siglo, 1913, con los actos festivos del mes de setiembre.
De las dos fotos que lo ilustraban destacamos el desaparecido edificio del matadero.
En este mes se celebraban tradicionalmente dos fiestas, como eran la Virgen de Setiembre (Natividad) y la fiesta de la Cruz, que tenía lugar en la Plaza del Cristo frente a la ermita del Santo Cristo, desaparecida en 1910 para trasladarla a la campa de San Roque.

La importancia que entonces tenían los txistularis en las fiestas queda patente en el Gran Concurso de Bandas de Tamborileros”, así como la presencia constante de los Conciertos de la Banda Municipal de Música.

miércoles, 28 de agosto de 2013

FOTOGRAFIA DE LA PLAYA DE PORTUGALETE



Para ilustrar la colaboración de ayer de José Luis Garaizabal, colocamos una fotografía que correspondía a una parte de otra más amplia procedente del los fondos de la Autoridad Portuaria de Bilbao.
Hoy recogemos el resto de la misma foto que nos parece que tiene gran interés.


martes, 27 de agosto de 2013

PRIMERA REFERENCIA A UN TRANVÍA EN PORTUGALETE



Jose Luis Garaizabal ha encontrado un documento muy curioso, sobre un proyecto de tranvía, que se remonta a 1858. Recordemos que el tranvía llegó a la Villa por primera vez en 1882. El documento se encuentra en el Archivo Municipal de Portugalete (C98 N56) y dice lo siguiente:.

Emilio LALOMBIERE, como director de CAISSE ET JOURNAL DES CHEMINS DE FER, solicita permiso al Ayuntamiento para instalar un tranvía desde la Plaza hasta la playa.
“Construir un pequeño tramway que facilite el acceso a los baños públicos de esa villa, evitando así las molestias a las que sin él se han visto hasta ahora los bañistas y dotando a la linda Portugalete con un medio de locomoción que permita a un gran número de enfermos imposibilitados para ir por su pie desde su casa a la orilla del mar.
Este tramway si ha de prestar los grandes servicios a que se le destina deberá extenderse desde el muelle del dique hasta las casetas de los baños como el que escribe piensa y espera poder hacerlos; pero desde luego desearía hacerlo partir de las inmediaciones de la plaza, habilitando al efecto un caminito que V. I. acaba de hacer construir entre ella y Las Arenas, el que se presta perfectamente para recibir la vía Galy Caralat ¿? Por cuyo sistema se construirá en tramway para lo cual solicita permiso para instalar sobre el cita camino los carriles y hacer correr sobre ellos uno, dos o más coches, aislados o formando un tren tirado por caballos”.

Fdo. José Llona o Llano
31 de mayo de 1858.

El 2 de Junio se aprueba por parte de la corporación.


En la foto que acompaña la entrada de finales del siglo XIX, se puede leer que el propietario de las casetas de baño en la playa portugaluja era Tomás Ranero.

lunes, 26 de agosto de 2013

LAS ESCALERAS DE GANDARIAS DEL MUELLE NUEVO



Ramiro Cardona, se nos queja de que las “escaleras de Gandarias” estén cerradas.
Nos pide que hagamos un llamamiento a quien corresponda, en este caso suponemos que a la Autoridad Portuaria, y a otros organismos municipales que puedan presionar, como lo suele hacer Eneko Arce desde la Cofradía de Mareantes, para que puedan ser usadas no solo por los pescadores que se saltan el cierre colocado actualmente.
Esto nos sirve para mostrar esta foto de hace un siglo, procedente de los Archivos de dicha Autoridad Portuaria de Bilbao, con el desaparecido palacio de Gandarias que dio nombre a dichas escaleras.
Aprovechamos para hacer otra reflexión: El único mareómetro del mundo que tiene la suerte de seguir existiendo, tiene la mala suerte de estar situado en una ubicación donde los organismos encargados de su funcionamiento lo tienen abandonado.
Y es que la realidad nos dice que casi no recordamos la última vez que lo vimos funcionando.

viernes, 23 de agosto de 2013

FUGAS EN LA POSGUERRA (2): GREGORIO SOLANO AHEDO


“La travesía del Montserrat” es el título de un libro editado el 22 de mayo de 2011 por la familia del santurtziarra Félix San Mamés Loizaga basándose en su diario de navegación. En él se narra cómo nueve jóvenes se fugaron en 1950 en un balandro desde Santurtzi a Veracruz para escapar de un régimen político que impedía todo tipo de libertades y acogerse a otro país libre, como era México, que les recibió como refugiados políticos.
Uno de ellos fue Gregorio Solano Ahedo, que llegó a Portugalete en 1914 con cinco años de edad y vivió en el cuartel de carabineros porque su padre pertenecía a este cuerpo. Había sido discípulo de Ruperto Medina en la Escuela del Campo de la Iglesia y estudió pintura en la Escuela de Artes y Oficios de Bilbao. Mientras trabajaba en La Naval, estudió las carreras de Facultativo de Minas y de Fábricas Metalúrgicas. En la guerra cayó prisionero en Santander y fue condenado a muerte en el penal del Dueso, pena conmutada por la de 30 años estando en el penal del Puerto de Santa María, de donde salió libre en 1942. Desahuciado para ejercer su profesión en Vizcaya, trabajó en otras zonas de España. Por fin, José Luis Algorri, antiguo compañero de celda en Puerto de Santa María, se acordó de él y le ofreció la oportunidad de fugarse a México en un balandro. Solano, ya casado y con dos hijos, la aceptó para recuperar más tarde a su familia.
Los hermanos José Luis Luis y Manuel Algorri Villanueva eran propietarios de un pequeño astillero en Lamiako, detrás del Campo de fútbol de Ibaiondo, donde fabricaban embarcaciones deportivas. Con siete compañeros construyeron el “Montserrat”, así llamado para hacer ver que lo había encargado un catalán.
El “Monserrat” tenía 13 metros de eslora, 3,85 de manga y 3 de puntal medio con un desplazamiento de 30 toneladas. Le pusieron un motor de camión para ayudar a las dos velas. Llenaron el depósito con 2.000 litros de gasolina y cargaron víveres y agua para un mes de travesía.
El día del Carmen de 1950 fueron a Santurtzi y participaron en la procesión. Cuando las demás embarcaciones volvían al puerto, el “Montserrat” se dirigió a Castro sin que nadie se enterase de la fuga. A la altura de Canarias el motor se estropeó y tuvieron que hacer la travesía a vela aprovechando los vientos alisios. El 22 de agosto, 38 días después de su partida, llegaron a la isla de Tobago (República de Trinidad y Tobago) al sur del mar Caribe, donde arreglaron el motor. Después de muchas aventuras, el 15 de octubre llegaron a Veracruz. Los nueve fugados con el tiempo montaron sus negocios en México y allí murieron.
En las fiestas del Carmen de 2011 algunos hijos y nietos de Félix San Mamés Loizaga presentaron en Santurce el libro ante numeroso público y, cómo no, participaron en la procesión y volvieron con ella.  


Tasio Munarriz

jueves, 22 de agosto de 2013

FUGAS EN LA POSGUERRA: LOS HERMANOS ORTIZ DE URBINA (1)


Para que la población estuviese controlada, todos los que salían de la Villa o de la provincia a cualquier lugar de España tenían que tener un salvoconducto (célula o carné de la Milicia Nacional) expedido por la autoridad militar o por el alcalde y tramitado por el gobernador en Madrid, que había que renovar cada seis meses. Las instancias tenían que ir acompañadas por unas pólizas de 1 a 10 pesetas además de dos firmas de avalistas
Los viajes legales al extranjero estaban muy restringidos y en los periódicos aparecían los nombres de las personas a las que se les había autorizado. Los trámites eran tantos y tan difíciles de cumplir que muy pocos tenían el privilegio de salir legalmente hasta 1952. Algunas personas decidieron fugarse clandestinamente por diversos motivos: escapar de la represión política, conseguir un futuro económico mejor, etc. Recojo tres testimonios:
El primer testimonio lo encontramos en setiembre de 1938, todavía en plena guerra en el Estado, aparecido en esta requisitoria del Boletín Oficial de la Provincia.
El siguiente, en el que nos centraremos hoy para continuar mañana con otro, es el de los hermanos Lucio y José María Ortiz de Urbina Azpeitia (Abaro 7) que hacia 1945 decidieron fugarse a América.
El único que estaba enterado de este proyecto era su hermano mayor Iñaki, que prefirió quedarse para ayudar a su madre.
Hablaron con el mugalari de Santurtzi “Josetón”, que les informó por dónde podían pasar la frontera y a quién recurrir en Iparralde para pedir ayuda. Una vez conseguido el dinero necesario, los dos hermanos fueron en tren hasta la frontera, pasaron a pié la muga por el monte y durmieron en un nido de ametralladoras abandonado. A la mañana se despertaron con una pistola en la sien. Los miembros de la resistencia francesa, que estaban persiguiendo a los soldados alemanes rezagados después de liberada Francia, les confundieron con éstos. Los Ortiz tuvieron que demostrar que no eran alemanes y que hablaban castellano y algo de inglés porque en 1937 habían evacuado con los grupos infantiles a Gran Bretaña.
En Hendaya una familia les acogió y se pusieron a trabajar de estibadores en el puerto. Allí se encontraron con otro portugalujo, Daniel Mandalúniz, domiciliado en El Progreso, que también se había fugado.
Los tres consiguieron colarse como polizones en un barco y llegar a América. Con el tiempo se separaron: Daniel trabajó de pastor en Idaho y volvió después de unos años; José María llego a ser jefe de bomberos en Caracas y, a la vuelta, montó un negocio de exportación en Madrid; y Lucio creó un negocio de venta y arreglo de palos de golf en San Francisco, California. Este solía volver a Portu por la Virgen de la Guía. En uno de sus últimos viajes se empeñó en ir a Hendaya para buscar a la chica de la familia que les había acogido 60 años antes. En agradecimiento le dio un fajo de dólares que ella no aceptó, hasta que Lucio lo colocó encima de una lámpara que colgaba del techo y salió corriendo. Esta deuda saldada fue una de las ilusiones de su vida, según cuentan sus sobrinos Iñaki y Jontxu Ortiz de Urbina Longarte.

Mañana seguimos con el caso de Gregorio Solano.
Tasio Munarriz


miércoles, 21 de agosto de 2013

VISTA DE PORTUGALETE TRAS LA GUERRA CARLISTA



Si ayer presentamos una vista de la Villa hacia 1890 hoy traemos ésta, anterior, que nos invita a analizar detalles como:
La torre de la iglesia desmochada tras el sitio de la guerra carlista.
Las casas del muelle viejo.
El fuerte de Campanzar en lo alto,
Los remolcadores de ruedas.
El ayuntamiento viejo, demolido en 1880 para construir el actual.
La torre de Salazar tapada por arbolado.

………

martes, 20 de agosto de 2013

EL FINAL DE LA DÁRSENA DE LA ESCALA (II)


 Como los materiales del antiguo Campo Santo no eran suficientes, Ventura Altamira solicitó permiso en Noviembre del 88 para instalar una vía provisional de servicio desde la playa a través de Mª Díaz de Haro, para transportar con vagonetas arena procedente de la barra.
Inicialmente pretendía verter por la zona de una de la escalas, pero el Ayuntamiento le obligó a modificar el eje del trazado con el fin pasar por la mesilla entre ambas escalas, dejando libre las dos escalinatas de bajada al muelle y rampa y le recomendaba que entablara el espigón que desde la vertical de la plaza avanzara hasta el sitio del relleno, dotándolo de barandillas y garantizando la seguridad del paso bajo el espigón. No sé si al final el trayecto sería éste o a través del puente de madera que conocemos por la fotografía inferior o si éste sirvió para el traslado de la piedra de las canteras de Axpe hasta el Muelle de Hierro en construcción (1881-1887).
Se le concedió el permiso con la condición de que quedara desmontado y las calles y plaza vueltas a su ser al cumplirse seis meses desde la firma del contrato y de no hacerlo así, sería el Ayuntamiento quien lo haría a su costa, pero satisfaciendo los gastos que se ocasionen con el importe de los materiales de las vías en primer lugar, se le recomendó dotar de un cambio de vías para agilizar el tránsito y evitar entorpecimientos a las gentes y al igual que en Las Canteras, se le prohibía trabajar en festivos y días de precepto, así como cuando se produjeran aglomeraciones de gente en la Plaza.
No he podido confirmar el final de las obras para aclarar la correcta datación de la fotografía inferior, fechada a mano en 1890, en la que se ve aún la dársena y el puente de madera, y que puede inducir a pensar que se produciría algún retraso durante 1889. En la fotografía superior, en la que ya se ve la estación que fue inaugurada el 25 de mayo de 1890 con el relleno ya realizado, añade más dudas al respecto. 

Jose Luis Garaizabal



lunes, 19 de agosto de 2013

EL FINAL DE LA DÁRSENA DE LA ESCALA (I)



 Tal y como nos contó “la fuente de La Canilla” en el programa de Fiestas de este año, al narrarnos sus vivencias debidas a la llegada del ferrocarril a Portugalete el 24 de Septiembre de 1888, el edificio de la estación de Portugalete no estaba aun construido y del antiguo puerto solo quedaba una pequeña dársena entre la Plaza y el final de las vías.
Pues bien, veamos cómo se rellenó el último reducto de la Dársena de la Escala.
En 1885, Casto de Zabala había redactado un proyecto de urbanización de los terrenos que ocupaba el antiguo cementerio en la parte trasera de la iglesia, una vez trasladado a Pando (1880-1882), en el que se contemplaba la nivelación del terreno hasta la cota de la parte delantera, construyéndose un pórtico-paseo que la rodeara a excepción de la torre y un camino que comunicara el Campo con la carretera. También aparecía en el proyecto un frontón con su pared izquierda conteniendo el talud de la carretera y el frontis en el lado de las actuales escaleras. El frontón no se construyó y el pórtico solo iba desde la torre a la sacristía original.
En 1888, el Ayuntamiento decide aprovechar las rocas y tierras para ser usadas en el relleno de la dársena y Berriozabal redacta un proyecto de vertedera de madera por la que lanzar los materiales hasta el Muelle de Vallecilla (Muelle Viejo) entre las casas de Vilichi y Castet (actuales números 16 y 18), con un costo de 2.420 ptas. (C098-076). El montaje de la vertedera suponía el desmontaje provisional de los aleros de las casas que daban a las escaleras y eliminar parte del pretil del Campo por el que se verterían las rocas. Para aminorar la velocidad de caída, se instalaron dos planchas de hierro que harían de freno y además se forró del mismo material la parte superior de la estructura. Los vecinos sufrirían de lo lindo con este “regalo”. El contratista al que se adjudicó la obra fue José Andrés de Alberdi, que la finalizó en Diciembre, poniéndola al servicio del contratista del relleno, Ventura de Altamira, al que se le concedieron cuatro meses para realizar el desmonte de terreno y el traslado hasta la dársena por medio de una vía provisional a lo largo del Muelle Viejo. En un primer momento le prohibieron realizar voladuras junto a la iglesia, exigiéndole extraer la roca con palancas y cuñas, pero todo quedó en prohibirle trabajar en festivos y durante las funciones de la iglesia en días de labor. De esta extracción ha derivado que a estos terrenos los conozcamos los portugalujos como Las Canteras. Al finalizar la obra, desmontaría la vertedera y los materiales pasarían a su propiedad.

Seguiremos mañana. Jose Luis Garaizabal


martes, 13 de agosto de 2013

PROGRAMA DE FESTEJOS DEL MES DE AGOSTO DE HACE UN SIGLO




Recogemos hoy el programa de las fiestas de 1913, correspondiente al mes de agosto.
Tras el primer día con carreras ciclistas y de cintas en el muelle nuevo, además de las regatas en medias barricas y bailables por la Banda de Música y los tamborileros, nos presentamos en la víspera de la Patrona, en que la Banda recorría las calles ejecutando una GRAN RETRETA que anunciaba la fiesta grande del día 15.
Un siglo después a este acto se le ha cambiado el nombre militar y se le denomina TAMBORRADA.
El día de la Patrona nos encontramos con un programa centrado en ese gran escenario que es la ría: Partido de Water Polo (una primicia que ahora celebra su centenario), cucaña y por la noche una Gran Cabalgata Marítima (de haber tenido continuidad hoy sería algo único).
El día de San Roque, desde las seis de la mañana la fiesta se desarrollaba en la campa del Santo, con una gran romería por la tarde. Curiosamente en este programa no cita la bajada, o “regreso” como señala en otros años, pero si que a las nueve de la noche, hasta las doce, continuaba la romería en la Plaza.
Finalmente la última semana del mes se centraban en regatas de balandros, cucaña, fuegos y baile.

Cerramos el blog, hasta el próximo lunes, deseando a todos unas buenas fiestas de San Roque.



lunes, 12 de agosto de 2013

CONCIERTO NOCTURNO EN LA BASÍLICA DE PORTUGALETE


La Asociación de Amigos de la Basílica de Portugalete ha organizado un espectacular Concierto Nocturno con motivo de la apertura de las fiestas de la Villa Jarrillera. 
Programado para las 21,00 h. de mañana martes, 13 de agosto, en la Basílica de Santa María, será un placer escuchar en la paz nocturna, la armónica conjunción del sonido del órgano, (un Henri Didier totalmente original de 1901 dotado con cerca de 2500 tubos), con el eco solemne de una trompeta inigualable, y con el arrullo del canto, mientras se contempla serenamente el afamado retablo del siglo XVI, y demás mobiliario de la magnífica "catedral" portugaluja.
Serán sus intérpretes Javier López de Arkaute al Órgano, Raimundo Flores “Mundi” con la Trompeta, y Pantxi García-Etxabe y Alfredo Cobos con sus voces de soprano y barítono, quienes ofrecerán un repertorio festivo con arreglo al siguiente programa:

INTRODUCCIÓN: 
Variaciones de Órgano y Trompeta a modo de improvisación, mezclando melodías de Marcelino Amenábar (1880-1923) y Eleuterio Cobos, con arreglos y armonización de Javier L. Arkaute.
BOTECITO, BOTECITO (Fede Cobos 1914-1974). Barítono y Órgano.
SONATA VIII (A.Corelli 1653-1713). Largo y Allegro. Trompeta y Órgano.
SANTA MARÍA BIRJIÑA KANTUA (M.Gorostidi 1913-1988). Soprano y Órgano.
TROMPETA EN DIÁLOGO (N.Clerambault 1676-1749). Trompeta y Órgano.
EL CAPOTITO (Fede Cobos 1914-1974). Barítono y Órgano.
AVE MARÍA (V. Vabilov 1925-1973). Soprano y Órgano.
MELODÍA EN ROCK (L.Gutierrez Aguirre 1921-2000). Trompeta y Órgano.
LA FLAUTA MÁGICA (A. Mozart 1756-1791). -Duetto- Soprano, Barítono y Órgano.
TRUMPET TUNE (J. Stalley 1713-1786). Trompeta y Órgano.
LA CHIMBERITA (Fede Cobos 1914-1974). Barítono y Órgano.
MUSICA ACUÁTICA (G.F.Haendel 1685-1759). Hornpipe. Trompeta y Órgano.

El concierto es gratuito y se entregarán Programas de mano, pero se exige máximo respeto.

Javier García-Borreguero y Ondiz


viernes, 9 de agosto de 2013

EL RACIONAMIENTO EN LA POSGUERRA: EL TABACO Y EL ESTRAPERLO



Finalizamos el articulo de Tasio Munárriz sobre el racionamiento, que habla del tabaco y del estraperlo, empezando antes con una noticia curiosa acaecida en 1945:

En 1945 llegó a la villa un cupo de 5.000 kg. de garbanzos procedente de Segovia. La distribución se hizo, según la orden del gobernador, que era el jefe provincial de Abastecimientos y Transportes, “entre funcionarios municipales, Autoridades y Jerarquías y Entidades Benéficas” a cambio del cupón Nº 3 correspondiente a legumbres cualquiera que sea la cantidad recibida. Por un cupón cada uno de los trece concejales, de dos sacerdotes, de la Guardia Civil, de los colegios de Santa María y del Carmen, de los PP. Agustinos, de las Siervas de María, de los 81 funcionarios municipales y de 18 maestros recibió cantidades diferentes. Hubo tres concejales y dos funcionarios que llevaron a sus casas 100 kg. cada uno. Al Hospital-Asilo le asignaron 600 y al comedor de los pobres 250.
No resulta extraño que el pueblo remedase con sorna una canción popular:

“Tres cosas hay en la vida: arroz, chorizo y garbanzos.
El que tenga estas tres cosas tiene familia en Abastos”

 Además de la cartilla de racionamiento de comestibles había otra cartilla para el tabaco. Los mayores de 18 años podían adquirir la “cartilla de fumador” con sus correspondientes cupones. Como los certificados de defunción tardaban en llegar a los estancos, fumaban hasta los difuntos. Algunos que no fumaban, compraban un cuarterón o tres capachas (tabaco de liar con palos que rompían el papel de fumar) o varios paquetes de “caldo de gallina” y los cambiaba por una hogaza de pan de estraperlo (mercado negro).
El estraperlo, aunque ilegal, estaba tolerado y era una salida a la crisis de alimentación de la época.
La hija de una tendera de Portugalete me cuenta que su madre iba a Dima a comprar alimentos propios del campo con el consentimiento de un teniente, que se llevaba la mitad de la mercancía. El estraperlo ayudó a muchas personas y enriqueció a otras. Los que vivieron aquella época podrían contar cómo el hambre agudizaba el ingenio y con sus anécdotas se podrían escribir muchos libros. Eran los “años del hambre”.
Los obreros y empleados de AHV tenían su cooperativa en Gregorio Uzquiano 5 y contaba con 335 asociados. Los alimentos también estaban racionados. Años después se trasladó a Correos 2.

jueves, 8 de agosto de 2013

ENRIQUE GARCIA-BORREGUERO GORDON Y EL ORFEON UNION MUSICAL



En el próximo Cuaderno Portugalujo, recuperamos la figura olvidada del pintor Higinio Polo, que con la llegada de la guerra civil tuvo que exiliarse de Portugalete.
En los años 30, anteriores a la contienda, pintó a numerosos vecinos, uno de los cuales, el de Antonio Garrido González, presentamos ahora por la amabilidad de su nieta Juana Mari Ponce Garrido. (Garrido a la derecha, unos años antes de morir y Polo en un autorretrato de los años 70).
Es interesante encontrar entre nosotros el mayor número de obras de este pintor. En este caso estamos ante el palangrero andaluz, nacido en 1862 en Fuengirola, y que en 1895 se afincó en la Villa. Según nos cuentan, al llegar pensó que como pescador que era podía vivir aquí mejor que en su tierra, por lo que pidió a su familia que le enviasen los aparejos de pesca, considerándosele así el introductor del palangre en Portugalete.
Igualmente su nieta nos comunica que fue uno de los portugalujos que perdió la vida en un bombardeo durante la guerra. ¿Quien va a desperdiciar una bomba para matarme a mí? decía, y siguió sentado en el dique sin querer correr como los demás al refugio del túnel de la estación.
Otro dato interesante a tener en cuenta en nuestro proyecto de Portugalete años 30, pues la Villa sufrió repetidos bombardeos de la aviación alemanda de la Legión Cóndor.

miércoles, 7 de agosto de 2013

URBANISMO PORTUGALUJO DE HACE UN SIGLO: LA CALLE GENERAL CASTAÑOS



Al explicar cómo era la calle General Castaños hace un siglo, recibimos una sorpresa con la foto que Pablo García-Borreguero nos ha pasado de la casa de su bisabuelo Modesto el farmacéutico, que ya presentamos en este blog, pero en sus planos constructivos.
A la izquierda aparece la foto de dicha casa de dos pisos, construida en 1877, donde estaba la farmacia y la calle General Castaños sin asfaltar con sus arbolitos recién plantados.

Esta casa dio paso en 1914, a la actual nº 6, con más alturas, proyectada por Emiliano Pagazaurtundua, y que se puede contempla años después, con la hilera de árboles más crecidos.

martes, 6 de agosto de 2013

URBANISMO PORTUGALUJO DE HACE UN SIGLO


 Finalizado el capitulo dedicado al Urbanismo en PORTUGALETE, en las dos primeras décadas del siglo XX, de la Colección El mareómetro, vamos a recordar a través de fotografías como era la Villa hace un siglo.
Empezamos hoy con la conocida entonces como “casa de Valle”, desaparecida tras la guerra civil.
Situada junto al edificio del mercado formaba parte de la plaza que existía en la parte baja de la calle Coscojales, taponando la salida de ésta a la Plaza del Solar.
Las tres fotos comparativas que recogemos nos muestran, la de la izquierda, cuando todavía no existía la calle Mª Diaz de Haro, con el edificio del antiguo edificio del ayuntamiento al fondo y la casa de Valle, de dos pisos, a la derecha y las escaleras que descendían de la plaza camino de la playa.
En la foto del centro, a la derecha la casa de Valle que en 1890 había elevado su altura a tres pisos y desaparecidas las antiguas escaleras para dar salida a la calle Coscojales.

La foto de la derecha (detalle de una postal tomada desde Las Arenas), la casa de Valle tras el antiguo kiosco de la Plaza, destacando en la parte superior el palacio de Martínez en el comienzo de Abaro.

lunes, 5 de agosto de 2013

EL RACIONAMIENTO EN LA POSGUERRA: LA ESCASEZ DE ALIMENTOS


 Tras el comienzo del artículo anterior de Tasio Munárriz, sobre las cartillas de racionamiento en los años de la posguerra, continuamos hoy con el mismo donde repasa la situación de los principales alimentos, el tabaco o el estraperlo:

Cada cartilla estaba compuesta por un talonario de cupones para aceite, arroz, azúcar, garbanzos, bacalao, tocino y varios y unas hojas con espacios para ser sellados por el tendero para carne, grasas y pan.
“Los de Abastos”, sin avisar, inspeccionaban los pesos de las tiendas para ver si estaban trucados. Los tenderos se las apañaban para corregirlos y demostrarles que eran exactos.
Para la venta de la carne había carnicerías designadas, sometidas al sistema del racionamiento, y otras de venta libre, mucho más caras y con un género mejor. Los huevos estaban fuera del racionamiento y la docena llegaba a valer más que un kilo de carne o pescado. De ahí venía el dicho de aquella época “Cuando seas padre, comerás huevos”.
El pollo era un lujo, uno de los platos preferidos en las fiestas familiares y en Nochebuena o Nochevieja. El café-café era casi desconocido y se utilizaba la mezcla de malta y achicoria con derecho a volver a usar las borras. Como la harina de maíz era barata, se consumía mucho morokil y talo.
La leche también caía fuera del sistema y era de varias clases según la cantidad de agua que contenía. Pero esta adulteración tenía un límite. A un vecino de Urioste que vendía la leche en la villa el alcalde le multó dos veces y, como persistía, el gobernador le sancionó con 500 pts. Esta vez la práctica viciosa consistió en que la leche sólo tenía “el 2% de manteca y bastante cantidad de agua”. A la leche sin agua se le llamaba “rusa” porque estaba sin bautizar; la bautizada recibía adjetivo de “española”. En 1942, 17 lecheros fueron sancionados con multas de 100 a 200 pesetas por vender leche adulterada.
El beneficio por la venta de calzado sobre costo en factura estaba controlado así: Hasta 10 pts, un 20%; de 10 a 20 pts, un 25%; de 20 a 30 pts, un 30%; y de 30 en adelante un 35%.
Al declararse en 1940 el comercio libre de la patata, su precio subió de tal manera que era inaccesible para la mayoría de la población.

Lo que sí había en abundancia era vino (1,60 pesetas el litro), boniatos, sardinas en salazón (arenques), algarrobas, etc. Los “chuches” de los niños eran precisamente algarrobas, chufas, regaliz de palo, etc. El precio del chiquito de vino rioja era de 10 céntimos de peseta (una perra gorda) en 1937, mientras que en la capital y los pueblos circundantes se vendía a 15 céntimos. El gremio de taberneros de la villa solicitó al alcalde subir su precio hasta esa cantidad. El billete del Puente costaba 10 céntimos (una perra) y el del bote 5 (una chiquita).

viernes, 2 de agosto de 2013

EL RACIONAMIENTO EN LA POSGUERRA: LAS CARTILLAS



Terminada la guerra en Vizcaya, desapareció el racionamiento de comestibles. La plaza del mercado estaba destruida por las bombas facciosas, varias tiendas de ultramarinos no se abrieron porque sus propietarios habían evacuado y la red de producción y transporte de comestibles estaba desorganizada. Quizás una de las fotografías más inmediatas a la ocupación de Portugalete por las tropas franquistas sea la protagonizada por una fila de vecinos haciendo cola para recoger alimentos en un local o en un camión de la Cruz Roja en General Castaños.
El problema más importante en esa época fue el de la alimentación. Durante los dos primeros años el comercio era libre, aunque los precios estaban tasados oficialmente y eran parecidos a los del racionamiento de la guerra.
El 14 de mayo de 1939, se volvió otra vez al sistema del racionamiento que duró hasta el 1 de junio de 1952. El gobierno decretó la intervención de determinados productos alimenticios y su distribución por la Comisión General de Abastecimientos y Transportes (CGAT).
Al principio la cartilla era familiar y cada persona tenía derecho a una ración de alimentos.
Como el censo del racionamiento superaba en un millón de personas al censo de población en toda España debido al fraude de tener varias cartillas y a la inclusión de difuntos, en 1943 la cartilla empezó a ser individual. Así y todo, el número de consumidores del racionamiento superaba en 100.000 personas al del censo de población.
En 1940 en Portugalete había 10.613 habitantes, pero para la regulación del abastecimiento sólo constaban 9.846 porque el resto habían evacuado, estaban encarcelados o servían como soldados del ejército “nacional”. Hasta 1983 el único período de tiempo en que descendió la población de Portugalete durante el siglo XX fue entre 1935 y 1940. El descenso fue de 202 habitantes debido fundamentalmente a las bajas por asesinatos, fusilamientos y muertes en el campo de batalla. En 1945 los censos de cartillas y de población tendieron a igualarse: Cartillas de 1ª categoría: 569; de 2ª 1.990; de 3ª 10.093; infantiles 461 para una población de 11.474 habitantes, aunque seguía habiendo más cartillas que vecinos.

Tasio Munarriz

jueves, 1 de agosto de 2013

JULIO GARCIA-BORREGUERO PADRÓ Y EL PUENTE COLGANTE



Julio García-Borreguero Gordón, casado con María Padró, del que hemos tratado en entradas anteriores y cuyos fondos fotográficos venimos usando, tuvo cinco hijos, Julio, y Antón, ingenieros, Rafael (el atleta,  marino y práctico), José María (Cheché), y Conchi, recientemente fallecida.
En la foto superior aparecen los cinco matrimonios en torno a su madre María Padró, con Julio a la izquierda, con su uniforme de ingeniero, junto a su mujer Keti Arrasate. Su hijo Javier G.-Borreguero Arrasate, Fajiko, nos envía algunas fotos para ir completando la saga familiar, entre las que se encuentra una de su padre en 1927, bajo estas líneas, cuando militaba en el Club Deportivo Portugalete F.C.
Queriendo dejar clara su actuación como ingeniero en la reconstrucción del Puente Colgante tras la guerra civil, le hemos pedido que nos lo aclare.
Al respecto nos dice lo siguiente:
Se presentaron al menos dos proyectos. Uno de un grupo de ingenieros de caminos de Madrid comandado por Aracil y el otro por mi padre y F. Lozano, ambos ingenieros en Zorroza en aquel momento.
El concurso lo ganó el equipo de Aracil. Entre otras razones para la adjudicación, se indicó que técnicamente el proyecto de Aracil era más moderno, ya que el de mi padre y Lozano se basaba en respetar el antiguo. Como anécdota diré que uno de los elementos modernos que incluía el equipo de Aracil eran las bragas, si, las bragas, que son los cables que unen la catenaria con el tablero. En el antiguo eran oblicuos y en el nuevo pasaban a ser verticales (son los que siguen ahí).
Aracil ofreció al equipo perdedor colaborar en la reconstrucción, encomendándoles tareas de segunda importancia. Así, nuestro padre se encargó de dirigir los trabajos de dragado de la ría retirando el tablero que impedía la navegación y otros elementos que cayeron al agua.
Aracil y mi padre se conocían de tiempos atrás, solteros ambos, y a él le habían enviado a poner en marcha la fabrica de Linares muy dañada por la guerra.
Esta es la realidad de su papel en el Puente que con la mejor voluntad nuestros mayores idealizaron, quizá exagerando un poco ese papel y que nosotros recibimos y hemos considerado cierta.
Más tarde y durante años fue el "Ingeniero de Puente" pero más bien honorífico, sin grandes hechos que relatar salvo la grave avería que sufrió en el caluroso verano de 1959-60 por causa de las dilataciones de los cables de anclaje que lo sujetan en ambas orillas pero que quizá es mejor no sacarla a relucir ya que hoy en día, la forma en que se solucionó no dejaría en muy buen lugar a los que la llevaron a cabo. Bien es cierto que en aquella época y en aquellas circunstancias estuvo hasta cierto punto justificada. Hay que recordar que el puente colgante era el único punto de unión entre las dos orillas siendo la otra alternativa el puente de Deusto. Este hecho (la avería) no se dio a conocer públicamente y nadie se enteró de ello ya que los trabajos se realizaban por las noches para no entorpecer el servicio que no se vio afectado en ningún momento aunque pudo existir un cierto peligro de accidente.