Debemos recordar que en aquellos años, la
sociedad cultural más progresista que existía en la Villa era el Circulo de
Bellas Artes y ATENEO, fundado en la década anterior y que no contemplaba la
presencia de mujeres entre sus asociados, ya que era solo para hombres.
Tuvo que ser en 1930, ante el ejemplo del
Ateneo de Madrid, que admitió a Clara Campoamor que representaba el avance del
feminismo, cuando los portugalujos decidieron abrir sus puertas a las mujeres.
En su declaración de principios apostaban por “cooperar en el encauzamiento intelectual de la mujer en nuestra Villa”, y
por “la presencia de la mujer en las Artes y las Letras, las escuelas,
universidades y academias y en el ejercicio de profesiones hasta entonces
detentadas exclusivamente por hombres”.
Ha pasado casi un siglo, la situación ha
cambiado mucho, pero el camino pendiente de recorrer todavía es muy largo. Sirva
esta entrada de adhesión al Día Internacional de la MUJER.
Publicado el 8 de marzo de 2017
Gracias por este bonito reportaje. Muy bonitas las fotos. Poquito a poco las cosas van mejorando gracias a las mujeres pioneras que han ido abriéndonos caminos.
ResponderEliminarZorionak emakume guztioi. Felicidades a todas las mujeres.