lunes, 8 de enero de 2024

LOS VIAJES A BILBAO EN CARROZAS ARRASTRADAS A LA SIRGA HACE DOS SIGLOS

  


Ya hemos citado en nuestro blog en otras ocasiones la existencia de uno de los trabajos mas vergonzoso en la historia de la Ría como era el practicado por infelices mujeres dedicadas a la sirga.

Hace dos siglos todavía no existía la carretera de Portugalete a Bilbao y el medio más cómodo para ir a Bilbao era la vía fluvial, utilizando unas embarcaciones, entre góndolas y traineras, conocidas como carrozas. Estos simples lanchones con una cámara a popa y arrastrados por parejas de bueyes o casi siempre a la sirga, con la sufrida hilera de encorvadas mujeres haciendo el trabajo de las bestias, invertían casi cuatro horas en el viaje.

Dos inconvenientes encontraban en este trayecto, como eran las embarcaciones que atracadas a lo largo de la ría no lo hacían en la margen izquierda, sino como algunas a la derecha, entorpeciendo su paso y el tramo de camino entre arenales que las aguas cubrían con la marea alta.

La anécdota al respecto que queremos recoger hoy aparece en el ejemplar del IRURAC BAT del 23 de diciembre de 1856 que nos facilita Karla Llanos.

Aunque ya en 1851 había llegado hasta Bilbao el primer vapor movido con palas, comprado de segunda mano en Bayona por Joaquín Mazarredo, la carroza que salía del Muelle Viejo a las dos de la tarde, al mando del famoso Ignacio “el carrocero”, izaba a proa la vela si hacía brisa, tenía algunos bancos destinados a remeros, pero en general la embarcación era conducida a la sirga desde la orilla.

César Estornés, nos dice que Ignacio Laca, el citado Ignacio, era el patrón más famoso en la carrera de Bilbao a Portugalete, con escala en Desierto-Erandio. Más conocido por Ignacio el carrocero, era el que poseía la más capaz, veloz y mejor pertrechada de las carrozas en servicio y por consiguiente la más solicitada. era el recadista de confianza, el que traía o llevaba a la capital toda clase de encargos.

Según el citado diario, en la tarde del domingo anterior ocurrió el recordado accidente de la anécdota.

Parece que a las dos y media subía a Bilbao la carroza arrastrada por la sirga, cuando cerca del punto llamado de los Ocho Ojos halló dos barcos franceses fondeados, con los calabrotes amarrados en tierra lo que impedía que la carroza siguiera su rumbo.

El primero arrió el calabrote para dejarle pasar, pero como el otro no le imitara, los que tiraban de la sirga le gritaron desde la orilla y como no les hacían caso, Ignacio el carrocero, fue a soltar el calabrote de la argolla donde estaba amarrado cuando le dispararon desde a bordo, hiriéndole en la mano y costado aunque como era con perdigón menudo no fue importante.

No nos cuentan como acabó el suceso, pero nos queda la anécdota de una de las páginas negras de nuestra historia en la ría: las sirgueras.

3 comentarios:

  1. ¿Esa foto es un fake? No hay noticias que el Titanic estuviese por esta zona.

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  2. Y la barquilla en medio... "Titanic 2", proximamente en sus pantallas, mas devastadora que nunca.

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  3. Esa foto es mas falsa que un billete de 15 €uros.

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