lunes, 12 de marzo de 2018

LAS ARGOLLAS DE LA PUNTA


Hace un mes, Aurelio González “el navarrillo” publicó en su blog “La vida pasa” unas fotografías de las argollas de la Punta, y tercié en Facebook con un comentario sobre la argolla que falta en la parte final del morro.

Haciendo memoria, habría que decir que durante 2011 y 2012 se realizaron una serie de obras en el Muelle de Hierro, algunas poco afortunadas desde el punto de vista del respeto debido a un elemento declarado Bien de Interés Cultural en 2012 (arriostramientos transversales solo al inicio y al final del muelle, sustitución de la barandilla original cegando las bajadas al nivel inferior, hormigón impreso en el suelo, hormigonado de las escaleras originales en el espigón del Sporting, ausencia de luminarias en la farola de ese espigón, mantener los “pasos” de hormigón que no existían en la versión original, abandono a su suerte al mareómetro que habían restaurado en 2000, etc.) .

La Autoridad Portuaria había corrido con la remodelación y parece mentira el poco tacto que tuvieron con el muelle diseñado por Evaristo de Churruca, que posibilitó vencer a la temible barra y facilitar el crecimiento del puerto y la industria vizcaína. El Ayuntamiento de Portugalete también “colaboró” con el extravío de uno de los dos hitos que daban inicio al muelle señalando la empresa constructora, “Maquinista Terrestre y Marítima de Barcelona”.

Volviendo a las argollas, hay que decir que no estaban colocadas en el muelle original, tal y como muestra esta fotografía superior con el rompeolas ya construido (1902) y sin embargo, las seis argollas no estaban instaladas.

La finalidad de las mismas, así como la de los seis motilones que desde el mareómetro llegan hasta el comienzo de la parte “solida” del muelle, no puede ser otra que el amarre de las dragas que sirvieron para eliminar los restos de la barra una vez que el muelle había hecho su “mágico” trabajo abriendo junto a él un canal constante de 4,58 m. de profundidad en bajamar. ¿Quién no ha paseado de chaval por la Punta y no las ha hecho sonar como si fuesen aldabas?

En Octubre de 2012, me di una vuelta hasta la Punta para ver en que habían consistido las obras. Cuál fue mi sorpresa, al advertir que faltaba la anteúltima argolla junto al faro y dado que había bajamar, ésta reposaba a la vista en las rocas junto a la planchada del morro. Al día siguiente envié una carta a la Concejala de Cultura del Portugalete, Italia Canna, para poner el hecho en su conocimiento: “No sé si una brigada del Parque Móvil la podrá retirar de las rocas, a las que en bajamar se puede acceder cómodamente por las escaleras que hay bajo el faro  y depositarla en lugar seguro hasta que o bien vosotros o la Autoridad Portuaria la reponga en su lugar.

Sería una pena que estando localizada, se perdiera y más en este año que se celebra el 125 aniversario de la construcción del Muelle de Hierro.”.

Al cabo de un mes, recibí una contestación verbal, comunicándome que “al no tener competencias sobre el muelle, habló con el Alcalde para que se comunicase a la Autoridad Portuaria y que fuesen ellos quienes acometieran la retirada y reposición”.

Dado el poco éxito de la gestión, ya que la argolla seguía entre las rocas, remití el escrito al contacto que tenía en la Autoridad Portuaria, que me había facilitado el plano del mareómetro, para que la hiciese llegar “a quien corresponda”.

Como se puede apreciar en estas fotografías de 2012 y 2018, la argolla va siendo engullida poco a poco por los mojijones y las ostras, y pronto no quedará rastro de esta nueva desidia, salvo el hueco mudo en el muro.

¡Ánimo Autoridad Portuaria, que todavía se puede rescatar y reponer!.

Y ya que se ponen manos a la obra, afiancen el resto de argollas, pues algunas pueden correr el mismo camino. Y ya que están, coloquen dos faroles clásicos irrompibles en la elegante farola de las escaleras del Sporting, pues lleva sin luz toda la vida.

  JOSE LUIS GARAIZABAL



1 comentario: