lunes, 2 de enero de 2023

PLAZUELA DEL CRISTO, UN LÍO PARA CARTEROS (1)

  


Al leer el trabajo que sobre El Ojillo ha escrito Juan Fermín López Markaida y que este blog ha empezado a publicar, me ha venido a la cabeza el comentario que me hizo una amiga respecto al lío que se traen los carteros y repartidores nuevos cuando tienen que entregar sus cartas o paquetes a los vecinos de la Plazuela del Cristo.

En el trabajo, se cita la casa nº 2 de Gregorio Uzquiano que antiguamente pertenecía a la plazuela. Así figuraba en diversos planos y documentos relativos a esta casa y de la que existió con anterioridad, en los que siempre se citaba como situada en la Plazuela del Cristo.

Antes de sumergirme en la búsqueda del año en que se cambiaron los límites de la plaza y calles que convergen o parten de ella, he consultado a la máxima autoridad en el callejero portugalujo, José Manuel López Díaz, autor del “Diccionario histórico de las calles de Portugalete” con el que consiguió un accésit en el IX Premio de Investigación Histórica “Mariano de Ciriquiáin Gaztarro” de 2007. Su respuesta fue rápida y contundente: “El cambio se produjo como consecuencia del Censo de Población, de obligado cumplimiento, realizado por el Instituto Nacional de Estadística en 1897”.

Antes de nada, hay que recordar que el nombre de la plazuela se debe a que allí estuvo, hasta 1910, la ermita del Santo Cristo del Portal, más o menos, donde se encuentra el estanco, escaleras, aceras, etc.

Acotados los años a consultar en el Archivo Histórico, vemos en los padrones de 1891 y de 1895-96, que la Plazuela abarcaba desde unos metros arriba del Cantón de la Iglesia, donde estuvo el portal principal de la villa, hasta el inicio del camino a Sestao (c/ San Roque) y que contaba con nueve edificios con su propia numeración (1, 2, 4, 5, 6 ó B, 8, 10, 12 y 13), entre los que no hay ninguna duda que el nº 5 correspondía a la posteriormente numerada como nº 2 del Ojillo (no se llamó Gregorio Uzquiano hasta 1914).

Tampoco ofrecen dudas los números 6-8-10 que correspondían a las casas de Sotera de la Mier, viuda de José Gorostiza, que después se llamaron popularmente como la casa de Chapa y se numeraban descendentemente como 8-10-12. Respecto al nº 13, hay que decir que correspondía al caserío de dos viviendas que fue derribado en 1916 para abrir la calle Maestro Zubeldia. En él vivían los Bilbao-Gardoki, antepasados de varios amigos y exvecinos, y que hoy alberga la Ferretería Moli.

En el Padrón de 1898, ya podemos comprobar que la información recibida era la correcta. En la Plazuela del Cristo, ya solo figuraban los números 6, 8 y 10, estando pendiente de resolver con una nueva revisión del padrón, a que calles se asignaron los antiguos números 1,2, 4 y 12. 

Para ilustrar estos cambios he preparado los siguientes gráficos. Continuaremos en otra entrada.


    JOSE LUIS GARAIZABAL




1 comentario:

  1. Como ya le expliqué en su día al autor de la entrada, cuando tocaba hacer el censo general de población, los ayuntamientos estaban legalmente obligados a revisar la numeración de sus edificios, poniéndola y corrigiéndola donde hiciera falta. Pero este mandato no se cumplía siempre.

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