Continuamos con el artículo de
Tasio Munárriz, analizando detalles de la relación entre Iglesia y Estado tras
la guerra civil, cuyo acto más representativo fue la celebración del Congreso
Eucaristico de 1943, cuyo cartel anunciador recogemos sobre estas líneas y la
misa en El Cristo en la foto inferior.
12.-Estaba prohibido blasfemar. A
un portugalujo que reprendió a unos chicos por tirar piedras a un perro “blasfemando en público del Santo nombre de
Dios” le cayeron 25 pesetas de multa. Lo había denunciado un carabinero.
13.- El “feeling” entre el
Ayuntamiento y la Parroquia era tal que el concejal Martín Fernández-Villarán
era miembro de la Junta Parroquial y el párroco Angel Chopitea lo era de la
Junta Municipal de colocación familiar, organismo encargado de encontrar asilo
a niños huérfanos o abandonados procedentes de las regiones devastadas por la
guerra. El párroco no fue ni siquiera a la constitución de dicha junta. Envió
al coadjutor Hilario Ugalde. También era miembro de la Junta Local pro-presos,
de la Junta Municipal de Primera Enseñanza y de la Junta local “Pro Navidad de
los humildes”.
El alcalde fue nombrado
Presidente Honorario de “La limosna del Papa a favor de víctimas de la guerra”
y Mayordomo Honorario de la Hermandad “Escuela del Santo Cristo del Amparo”.
Esta Hermandad se constituyó en 1943 y el mayordomo en 1946 era Julián Bayo
mientras que el puesto de R. Abad lo ocupaba el párroco. Se encargaba de
organizar las procesiones de Semana Santa, que eran los únicos espectáculos
públicos porque no había cine ni baile en esos días.
14.- Del 16 al 20 de junio de 1943 se celebró un
acontecimiento religioso en la Villa que marcó toda la época. Angel Chopitea, a
la sazón arcipreste de la comarca, organizó un magno Congreso Eucarístico, al
que los ayuntamientos de la zona minera, margen izquierda y Getxo contribuyeron
con la presencia de sus corporaciones y una subvención económica importante. La
del Ayuntamiento de la Villa fue de 5.000 pesetas. A Portugalete llegaron miles
de fieles.
Fue con motivo de este Congreso
cuando a la calle “Buenavista”, que era la última parte de “General Castaños”,
se le puso el nombre de “Santísimo Sacramento”.
15.- La Corporación presidió la peregrinación de los portugalujos a Elorrio para venerar los restos del Beato Valentín de Berriochoa. También fue a la peregrinación a Begoña que partió de la Plaza del Ayuntamiento de Bilbao.