El creciente descontento de la clase obrera en España, llevó a la cristalización de un sindicalismo terrorista que en Portugalete estalló el 28 de septiembre de 1919 en plena huelga de los trabajadores de la fábrica La Mudela, de Sestao, propiedad de los Martínez Rivas. Aunque el objetivo era Juan Meyer, director de la misma, la víctima fue Laura Reding, su esposa. La crónica de El Siglo futuro decía:
Esta tarde paseaba el señor Meller, acompañado de su esposa, por el muelle de Portugalete y cerca del anochecer se dirigieron ambos a su domicilio que es la finca “Villa Carmen”, en la carretera de Portugalete a Santurce, subiendo por un atajo que se conoce con el nombre de Camino del Cuervo. Súbitamente les salieron al encuentro dos desconocidos, que vestían gabardinas claras y sacando cada uno de ellos un revólver, se abalanzaron contra el director de la fábrica. Instantáneamente la señora de Meller se colocó ante su marido para defenderle con su cuerpo. Los agresores dispararon a su vez sus armas y la abnegada y valerosa dama recibió dos balazos. El señor Meller sacó su revólver y disparó contra sus agresores que huyeron velozmente sin que el ingeniero pudiera alcanzarles aunque les persiguió largo trecho.
La señora de Meyer falleció poco después, el 3 de octubre, víctima de complicaciones gástricas. El entierro fue multitudinario, “presidiéndolo el alcalde de Portugalete, las autoridades y el presidente de la Asociación de ingenieros, señor Rivas, asistiendo muchísimos obreros como protesta contra el atentado” (La Accción, 3-10-1919).
El cadáver se trasladó como recoge la foto a lo largo de la carretera de Abaro hasta el cementerio de Pando donde quedó depositado para su posterior traslado a Luxemburgo.
Junto a la foto de la esposa colocamos la portada de la revista Nuevo Mundo del 10 de octubre de 1919 que se puede consultar en la Hemeroteca Nacional.
Publicado el 6 de abril de 2011
el comentario que haceis de sindicalismo terrorista, no me parece adecuado con vuestro pluralismo, sinceramente creo que no habeis analizado la situacion en la que se desarrollaron esos acontecimientos, habeis tirado de una brocha muy gorda.
ResponderEliminarespero mas de vuestros analisis.
Sinceramente, a mí el artículo me parece perfecto y que refleja una realidad social entre patronos y obreros. Cerrar los ojos a eso es no saber mucha historia. Juan H.
ResponderEliminarMe parece que el comentario está movido por la envidia ante el desconocimiento de los acontecimientos de nuestra villa perfectamente documentados. Hay cosas para las que no hay que ser plural, sino que son como son. El artículo es muy interesante. Patricia.
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