Antes de empezar el año con las entradas diarias, queremos hoy referirnos al tercer documento que preparamos al final de cada ejercicio, tras la memoria del año que acaba y las cuentas del mismo: actividades previstas y presupuesto para 2011.
Si el presupuesto es simplemente adaptar los ingresos y gastos de años anteriores haciéndolos cuadrar, los proyectos a realizar es otra cosa: ¿Qué títulos o temas pensamos publicar?
Como es algo que se nos suele preguntar, adelantaremos las ideas que tenemos al respecto.
En la última página de cada libro del Mareómetro incluimos los títulos que tenemos en preparación, aunque no se descarte nunca la aparición de algún título imprevisto.
Queremos recoger la historia de la Villa en las dos primeras décadas del siglo XX y en los años treinta, lo que llamamos la década crítica. Muchos de los temas nos van apareciendo en el blog y otros investigando en el Archivo Histórico Municipal pues no hay mucho publicado sobre estos años.
Por otra parte tenemos que completar la Trilogía de novelas portugalujas de Juan Antonio Zunzunegui, con LA ULCERA, al estilo de las dos anteriores en cuanto a ilustraciones, haciendo hincapié en que el autor está reflejando con detalle la historia de la Villa de la primera parte del siglo XX, a través de la vida de un indiano.
Como en ocasiones anteriores hemos recurrido a la Biblioteca de Txomin Hermosilla que posee todas ediciones publicadas, pues nosotros sólo tenemos la edición de las obras completas, para completar detalles que no se repiten en todas, como esas Palabras al lector, que incluyen algunas de ellas en que recuerda:
Yo, señores, soy vascongado por los cuatro costados, de la costa vascongada que se asoma en el Abra de Bilbao, por Portugalete, y desde niño he conocido la gloria y la tristeza de los indianos. Toda la costa cantábrica es un pañuelo en adiós para los que se van y para los que vuelven de América.
La nómina de indianos portugalujos es amplia, recordando entre otros en los primeros años del siglo XX a dos, como fueron Manuel Calvo y Gregorio Uzquiano. El primero se embarcó de niño para La Habana y el otro murió en el Hotel del Muelle Nuevo, como sucede con el personaje de la novela.
En cuanto a los Cuadernos Portugalujos, se trata de recopilar los artículos diversos que se han ido tratando desde este blog, así como algún tema monográfico que nos ha sugerido.
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