Interesante fotografía cedida por María Jesús Benedicte, al paso de
una procesión de Semana Santa por la Calle Nueva.
Tras los pasos procesionales de las cofradías y delante de las autoridades
municipales con sus maceros, todo el cabildo parroquial con D. Angel Chopitea,
D. Víctor, D. Julio, D. Hilario y D. Miguel, que había llegado a Repélega en
1949.
En la parte inferior de la calle se aprecian los dos pabellones de Araco y
Alberdi, Beascoechea y Cia dedicados a almacenes de madera que desaparecerían
al entrar en la década de los 60.
En la entrada de dichos talleres era corriente ver depositadas maderas que sirvieron de referencia a la gente de fuera que llegaba a la Villa (generalmente los de Sestao al parecer) que empezaron a referirse a ella no como calle sino como “cuesta” y con el apelativo “de las maderas” que desgraciadamente tras el fuerte crecimiento por la emigración de aquellos años fue adoptado por mucha gente y actualmente se ha convertido en habitual.
La versión del nombre de "cuesta de las maderas" puesto por los sestaotarras al ir a Portugalete la he leído otras veces, yo la verdad no lo acabo de ver, si vienes de Sestao no pasas por ahí, si vienes de El Valle, Ortuella o Santurce si, los de Sestao entran por la Basílica o por la calle del medio, ¿para que van a ir por la cuesta de las maderas?. Un saludo.
ResponderEliminarTe doy toda la razón. Mi padre decía que se lo había puesto "gente de fuera".
ResponderEliminar