La segunda etapa en la vida del
Ikusgarri Euskal Dantzari Taldea, se puede considerar de 1973 a 1986 que según denomina Emilio Xabier Dueñas es un paso al frente: cambio de rumbo y
ampliación del repertorio.
En ese año de 1973
se produce un golpe de timón ya que se modifica y amplia notablemente el
repertorio, que de forma ininterrumpida sería uno de los pilares de
funcionamiento del grupo y su consolidación coreográfica. Para ello se organiza
un festival invitando a los principales grupos de la provincia, que muestran
una pequeña variedad de danzas del país.
Adoptan la
variante de "Espata dantza" procedente de Garai y confeccionan una
bandera idéntica a la utilizada en dicha anteiglesia. El nuevo repertorio lo
inauguran el día de la Virgen de la Guía de 1975. Y en agosto salen por primera
vez al extranjero (Francia), y que se repetirían en los años posteriores por
diversos paises
Si en Repelega
presentaban sus nuevos repertorios, el escenario del Zubi Alde sería testigo también
de importantes actuaciones en los primeros años 80, así como en diversas localidades
de la provincia.
En 1977 al no
ser propiamente un grupo parroquial es trasladado de la planta alta del
edificio a los sótanos del mismo que tienen que acondicionar con su propio
trabajo.
Conviene
recordar también que su presencia no podía faltar en navidades con el Olentzero
o por Santa Agueda.
Finalmente sus
últimas tres décadas, 1986 a 2017, que son el último eslabón hasta la
actualidad, se puede considerar como de su divulgación en el exterior del país.
Este último
periodo está marcado, entre otros aspectos por la participación en festivales
fuera de Euskal Herria, sin olvidar su presencia en las localidades vizcaínas.
A su ya extenso
repertorio suman estos años las danzas de los Carnavales de Lapurdi o el
"paloteado" de la Ribera Navarra, entre otros e incorporados a EDB
forma parte del espectáculo "Artazi", y al amparo de la Diputación
del programa "Herriz Herri".
Es de recordar
su 25 aniversario en que presentaron en el escenario del Zubi Alde un gran espectáculo
en colaboración con la asociación Ortzadar.
Entre 2005 y
2006 abandonan el sótano de las dependencias parroquiales a unas nuevas en un
edificio municipal de una planta y a nivel de la nueva calle José María
Martinez de las Rivas.
No citamos aquí
a las numerosas personas, niños, jóvenes y adultos, de ambos sexos que han
aportado sus conocimientos y su trabajo en los distintos apartados, ya sea la
recuperación de indumentaria, instrumentos, repertorio, o participación en las
fiestas del barrio, y en las bajadas de San Roque, algunos de los cuales llevan
ya cuatro décadas, y que con su dedicación y esfuerzo han escrito esta importante
historia de Repelega, que esperamos que dure muchos años a pesar de las dificultades
actuales.
También habrá
que tener en cuenta, al igual que se hizo en su día con Miguel Pérez de
Heredia, de perpetuar su nombre poniéndoselo a una calle, si es posible en su
zona, ya que este grupo ha sido el verdadero dinamizador cultural de la misma.
No hay comentarios:
Publicar un comentario