Hace unos meses y mientras esperaba la
llegada del bote al embarcadero, advertí que la lancha que me debería trasladar
a Portugalete no tenía pintados los característicos “ojos” a ambos lados de la
proa, así que le pregunté al botero por su ausencia y me contestó que en la
última sesión de pintura se les había olvidado pintarlos.
Me picó la curiosidad y continué con mis
pesquisas preguntándole por el significado. Nada me supo decir, así que en los
siguientes días pregunté a un par de boteros más, obteniendo la misma
respuesta.
Consultados nuestros habituales asesores
en temas marítimos, tampoco supieron darme ninguna respuesta. Tal vez Carlos,
el botero jubilado, nos pueda echar un cable con la investigación, pero de
momento no hemos podido contactar con él.
Repasando el archivo fotográfico, vemos
como las embarcaciones antiguas a remo y vela que
desempeñaban este trabajo en Portugalete, no llevaban distintivo alguno y todo
hace pensar que debió comenzar a usarse al constituir la Agrupación de Boteros
al finalizar la Guerra Civil. Aparecen entonces las lanchas a motor con su
característico color verde y sus ojos blancos a las que nuestros mayores
llamaban gasolinos (lanchas, botes, pero nunca barcas). Hoy en día, también han
incorporado estos ojos a las embarcaciones del pasaje entre Erandio y
Barakaldo, pero sobre fondo azul.
Estas dos empresas son las
supervivientes de las once que existieron antaño: 1.- Grúa Grande (Carola), Campo
Volantín; 2.- Astillero Euskalduna; 3.- Olabeaga cambio Hospital; 4.- Toldos, Olabeaga;
5.- Canal de Deusto; 6.- Lutxana, Basurto, Zorrozaurre, Cadagua (o también
Elorrieta–Cadagua); 7.- Lutxana, Barakaldo; 8.- Erandio. Barakaldo; 9.- Axpe, La
Naval; 10.- Lamiako, La Iberia; 11.- Portugalete, Las Arenas. (Datos
facilitados por Manu Orbe).
Tras varias consultas en internet,
podemos ver como ya en los tiempos del antiguo Egipto, sus embarcaciones
llevaban pintados dos ojos como símbolo protector contra el mal de ojo y como
elemento mágico para que encontrasen el rumbo seguro en las singladuras por el
Nilo o por el Mediterráneo.
El ojo de Horus o Udjat se extendió por
todo el Mediterráneo ya fuese pintado o tallado en las amuras, usándose en la
actualidad en muchos lugares (Malta, Cerdeña, Chipre, Portugal, Málaga,
Cataluña, etc.), encontrándolo también en las lejanas tierras de la
desembocadura del Mekong en Vietnam.
En la costa vasca, los pesqueros llevan
una estilizada Udjat conocida como “begiordeak” o “begiyek”. El ojo más
parecido, sin párpados, a nuestro Udjat portugalujo lo encontramos en alguna
lancha de pesca de Nazaré (Portugal) donde dicen que servía para “ver los
cardúmenes y los peligros del fondo”.
Sea cual fuere el motivo por el que pintaron
estos “ojos” en nuestros botes, deseamos que sigan muchos años protegiendo a
los boteros en su duro trabajo y a todos los pasajeros.
JOSE LUIS GARAIZABAL
9 de Septiembre de 2017 (San
Nicolás de Tolentino)
La foto superior con las cuatro
lanchas lleva la firma de Andoni Maseda 2015
Entrevistado Carlos Salgueiro, el botero jubilado que mencionaba en el artículo, me dice que el "ojo" se pinta desde que se constituyó la Agrupación de Boteros en 1949 y que no tiene ningún otro objetivo que el estético, simulando un "ojo de buey" o un "escoben" . La primera embarcación a motor, que él no conoció, se llamaba SAN ROQUE.
ResponderEliminarJOSE LUIS GARAIZABAL